Messi, el '10' está de vuelta

La imagen que el barcelonismo quería ver: Messi, de nuevo, con la camiseta del Barça

La imagen que el barcelonismo quería ver: Messi, de nuevo, con la camiseta del Barça / FC Barcelona

Dídac Peyret

Dídac Peyret

Apareció Messi en la Ciutat Esportiva y el Barça respiró aliviado tras semanas de desencuentros. Fue algo así como el regreso a la vieja normalidad. A la zona de confort. La imagen, aunque vista mil veces antes, generó una sensación nueva en el barcelonismo.

Una mezcla de ilusión y alivio. Como despertarse de una pesadilla que, durante un buen rato, pareció devastadoramente real.  

Tras días de hacerse la idea de que el mejor de la historia se iba, aquello fue la confirmación de que, al menos, de momento Messi sigue siendo del Barça.  

La imagen tuvo su impacto porque el vínculo sentimental entre el jugador y club sigue ahí. Puede que la relación haya sido tóxica por momentos (el club ha tenido una dependencia de Messi asfixiante para cualquiera, incluso para el ‘10’), pero de momento el Barça ha logrado salvar la ruptura en el tiempo de descuento. 

Lo ha hecho contra la voluntad del futbolista. El peor punto de partida posible pero en el Barça confían en que, si las cosas funcionan deportivamente, Messi se reenganche al proyecto

El primer paso

El primer paso es que Koeman logre seducirlo, algo que no ocurrió en la primera reunión de hace unas semanas. Entonces Messi le dijo que se veía fuera del club, un mensaje que se concretó en el famoso burofax. 

Ayer el holandés volvió a tener una charla privada con el argentino. Y aunque le recordó que sería una pieza básica en el equipo, la sensación es que dejará de ser el filtro de todo como hasta ahora.

Sobre todo con la llegada de Koeman, un técnico acostumbrado a cambiar el orden establecido. A comenzar nuevos proyectos. Y a apostar por generaciones nuevas de futbolistas. La salida de jugadores como Vidal, Suárez o Rakitic subraya esa línea. Pero incluso Koeman ha hecho una excepción con Messi. 

Contará con él y será importante. A pesar de que el argentino quiera irse. Y lo hará tras asegurar en su presentación que “solo quiero trabajar con jugadores que quieran estar aquí”.  

Messi habría preferido irse, pero también es un jugador que se mueve por sensaciones y de mecha corta. Ya ocurrió con Argentina cuando anunció que no vovlería. Y también en el Barça cuando en otras ocasiones dejó caer su intención de irse. 

Antes que nadie

Ayer llegó el primero conduciendo un mercedes negro tres minutos antes de las cuatro de la tarde y cubierto con una gorra. Messi fue recibido por curiosos y fotógrafos.  

El argentino se entrenó en solitario, como procede con el protocolo sanitario tras pasar los PCR en su domicilio. Y así se repetirá hoy también, a la espera de pasar de nuevo el test e incorporarse al grupo.  

Messi se ejercitó junto a Coutinho, otro de los jugadores que se incorporó más tarde. Y los dos se espera que ya puedan entrenarse con el grupo a mediados de semana. Hoy seguirán ejercitándose por su cuenta en las dos sesiones que tiene preparados Koeman tanto este martes como mañana.

El jueves la plantilla tiene fiesta y el viernes regresarán los entrenamientos ya con vistas al amistoso del sábado contra el Nàstic de Tarragona. Koeman no ha podido contar hasta ahora con gran parte de la plantilla por varios motivos. 

Esta semana empezó sin la mayoría de internacionales, que se irán incorporando tras participar en sus compromisos. A esta situación hay que sumarle todo lo vivido con Messi y algunos casos de coronavirus como Pjanic y Todibo.

Koeman irá recuperando futbolistas estos días y podrá hacer pruebas en el primer test, el sábado, contra el Nàstic en el estadio Johan Cruyff a partir de las 19.30 horas. 

Un partido para el que podría incluso ya contar con Leo Messi. Una buena oportunidad para empezar a ver qué sistema y tipo de equipo proyecta para recupefrar el ánimo del ‘10’.