Messi está a un gol de ser leyenda en la Copa

Messi volvió  a maravillar con un golazo de vaselina

Messi volvió  a maravillar con un golazo de vaselina / LALIGA

David Salinas

David Salinas

La Copa del Rey 2019 ofrece muchos y variados alicientes al FC Barcelona. Caso de ganar el trofeo, el conjunto catalán sumaría su noveno doblete (Liga y Copa). Y tres jugadores (capitanes) de la plantilla –Leo Messi, Sergio Busquets y Gerard Piqué– igualarían al hombre récord de la competición, ‘Piru’ Gaínza (Athletic), que en su palmarés cuenta siete trofeos del KO. Hay, todavía, otro aliciente más: de anotar Leo Messi en el Benito Villamarín, el argentino se convertiría en el primer futbolista en convertir goles seis finales de Copa, superando a un mito del fútbol vasco: Telmo Zarra, que firmó conquistas en cinco finales.

El delantero del Athletic no inició con buen pie su periplo en las finales de Copa. En la primera que jugó, en 1942, pese a anotar un gol (el 3-3, que forzó la prórroga), su equipo acabó doblando la rodilla contra el FC Barcelona (4-3) después de un gol de Mariano Martín. El ariete rojiblanco volvió a jugar la final en la siguiente temporada (1942-43) y entonces sí fue decisivo: marcó el gol del triunfo (1-0) contra el Real Madrid, en la prórroga.

Y volvió a serlo en la final de 1944, disputada en el estadio de Montjuïc entre el Athletic y el Valencia (2-0). Zarra abrió el marcador en el minuto 21. El segundo tanto del conjunto de San Mamés llevó la firma de Escudero, que marcó en la recta final del primer tiempo. Y en 1945, en la cuarta final consecutiva que jugó, volvió a ver puerta. Marcó el momentáneo empate a uno en la victoria (3-2) contra el Valencia, también en Montjuïc.

Su buena racha se vio interrumpida en la final de 1949. El Athletic perdió 1-0 contra el Valencia, pero volvió al gol en la cita de 1950, en la que el equipo rojiblanco se impuso 4-1 ante el Valladolid en Chamartín. Los cuatro tantos llevaron la firma de Zarra, por aquel entonces uno de los jugadores más cotizados del fútbol español. Marcó el 1-0 en el minuto 15 y los otros tres goles, en la prórroga (94’, 96’ y 117’). Y la última final de Zarra, la de 1953, como la primera, fue contra el FC Barcelona, con derrota por la mínima (2-1) y sin gol por su parte.

Un gol...

El récord de Zarra se ha mantenido a lo largo del tiempo pero desde la irrupción de Messi las estadísticas del torneo del KO han empezado a verse amenazadas por el crack argentino. El ‘10’ del Barça, además de poder ser uno de los jugadores con más títulos, puede ser el único en convertir goles en seis finales. Su carrera hacia este récord empezó en la primera cita que jugó, en Mestalla, en 2009.

Fue el primer título con Pep Guardiola en el banquillo. Messi deshizo el empate a uno y anotó el 2-1 en el minuto 54 al rematar con la zurda, desde el punto de penalti, un rechace del meta Iraizoz a disparo de Eto’o. No marcó en la segunda (2011), que perdió contra el Real Madrid (0-1) en Mestalla, pero sí en la tercera, en 2012, contra el Athletic (3-0).

En la siguiente, 2014, se volvió a quedar sin marcar contra el Real Madrid (1-2). A partir de entonces jugó otras cuatro finales y marcó en tres de ellas. En la primera, 2015, firmó un doblete en el Camp Nou contra el Athletic. El primer gol del argentino es una las ‘joyas’ de las finales de Copa. Se hizo con el balón en la zona ancha y puso rumbo hacia el marco del Athletic sorteando a cuantos rivales le salieron al paso. Un gol inolvidable.

En 2016, contra el Sevilla (2-0), no vio puerta pero fue el autor de las dos asistencias: a Jordi Alba y Neymar, ambas en la prórroga. En 2017, contra el Deportivo Alavés (3-1) marcó uno de los goles y en la última final, la de 2018 en el , ante el Sevilla (0-5), anotó otro además de dar dos asistencias. Suyo fue el 0-2 a los 31 minutos, después de recibir de Jordi Alba. Y dio el 0-3 a Suárez y el 0-4 a Iniesta.

El ‘caso’ Samitier

Otro jugador del FC Barcelona, el legendario Josep Samitier, marcó en cuatro finales, aunque en una de ellas, que contempló tres partidos, anotó en dos.  No vio puerta en la primera que jugó (1920, contra el Athletic), pero sí en las cuatro siguientes: 1922, contra el Real Unión de Irún (5-2); 1925, ante el Arenas de Getxo (2-0); 1926, contra el Atlético de Madrid (3-2) y en 1928, contra la Real Sociedad.

Esta final, disputada en Santander, se resolvió en tres partidos. En el primero (1-1) Samitier marcó el gol del Barça, en el segundo, otro empate (1-1) se quedó sin marcar y en el tercero (3-1), inauguró el marcador a los 9 minutos. La idolatrada figura azulgrana jugó otra final, en 1932, contra el Athletic, pero perdió y no vio puerta (1-0).