FC BARCELONA

Messi entra en la tercera fase

El jugador ha entrado en la cuarta semana de su recuperación con el objetivo de seguir quemando etapas y empezar cuanto antes a tocar balón

Messi, entra en la tercera fase

Messi, entra en la tercera fase / sport

JAVIER MIGUEL

Leo Messi encara con ilusión y optimismo su cuarta semana lesionado con el reto de estar a las órdenes de Luis Enrique para el partido del próximo 21 de noviembre ante el Real Madrid en el Santiago Bernabéu. Aún faltan 25 días y las sensaciones están siendo buenas. Está claro que podrían ser aún  mejores, pero en el caso de la lesión de Messi –una rotura parcial de ligamento colateral interno de la rodilla izquierda– la prioridad dentro del club es evitar ante  todo un paso atrás en su recuperación.

A día de hoy, los plazos siguen totalmente marcados para que llegue al clásico sin problemas. De hecho, desde el club dejan caer con discreción que va con una semana de retraso, pero que eso no será impedimento para que pueda jugar contra el Real Madrid, ya que se habló de siete a ocho semanas para su vuelta a los terrenos de juego, teniendo muy en cuenta que el partido ante el Real Madrid se circunscribía ya en la octava semana. 

Lo más importante es que el jugador sigue trabajando con el objetivo prioritario de estar contra el Real Madrid. Desde ayer cuenta con un nuevo refuerzo en su recuperación, ya que a la presencia desde hace unas semanas de su fisioterapeuta de confianza, Luis García, se unió su masajista y mano derecha, Marcelo D’Andrea, que aterrizó el domingo pasado en Barcelona. 

Hasta ahora, Messi había estado trabajando codo con codo con el fisioterapeuta del club, Roger Gironés. Bajo su supervisión, entró de pleno en la segunda fase de recuperación en la que se empieza a dar movilidad a la rodilla dañada a base de electroterapia, máquinas del frío y ejercicio manual, teniendo siempre en cuenta la tonificación para no perder la masa muscular. 

El objetivo de la segunda fase es que el jugador pueda empezar a correr sin problemas. Y aquí es donde se integrarán a pleno rendimiento las dos personas de confianza del jugador. En principio, está previsto que a finales de esta semana o a inicio de la próxima a más tardar, Leo Messi empiece a correr. Al principio carreras cortas y suaves para ir incrementando el ritmo hasta llegar a realizar carreras continuas de intensidad media. Esta fase es la más importante de la rehabilitación y la antesala a su vuelta a los entrenamientos. Una fase dura, ya que el jugador tendrá que acumular carga de trabajo a diferentes niveles, tanto aeróbicos como anaeróbicos.

Messi, según confirma su entorno, tiene muy claro que va a llegar al partido. Los servicios médicos también apuntan en esta dirección y evidentemente Luis Enrique espera al jugador con los brazos abiertos.

Lo que está muy claro es que no se le forzará en ningún caso. Si no llega al final al partido contra el Real Madrid no será ninguna debacle en el seno del club. El objetivo prioritario es que se recupere bien y evitar cualquier recaída, teniendo en cuenta que la temporada es muy larga y al final en el clásico solo están en juego tres puntos.

En cualquier caso, la no convocatoria del Tata Martino también es un alivio para Messi, ya que así se puede centrar única y exclusivamente en el Barcelona. Ahora tiene por delante cuatro semanas más para acabar de recuperarse sin tener la presión de la selección argentina en el horizonte. 

De hecho, los médicos de la albiceleste conocen de primera mano el estado del jugador gracias al fisio Luis García, que también es recuperador de Argentina.  La posibilidad de que estuviera el 12 de noviembre para el partido ante Brasil era totalmente imposible y que participara cinco días más tarde en Colombia era un riesgo demasiado alto para asumirlo, sobre todo teniendo en cuenta los grandes inconvenientes de este viaje, muy pesado y con muchas horas de avión. Así pues, el Tata siguió las indicaciones de los galenos de la selección y descartó al crack argentino muy a su pesar porque se están jugando la clasificación para el Mundial de Rusia y ha empezado con solo un punto de seis posibles.

La situación que se vive en el seno del club es de optimismo respecto a la recuperación de Messi, no se trata de un optimismo desbordante porque se trata de una lesión con muchas aristas, pero en todo caso la rehabilitación hasta ahora está siendo un éxito. 

Nadie quiere dar por seguro que estará ante el Real Madrid, pero se respira un ambiente positivo en todos los aspectos y aún más porque el jugador es el primero que está convenido que llegará.Él mismo ya aseguró hace pocos días que no se ponía plazos para su vuelta y que serían los médicos quienes acabarían marcando su regreso. Pues bien, los galenos lo tienen también muy claro: llegará al clásico. 

Así pues, que todos los culés  del mundo respiren aliviados porque cada día falta menos para que el mejor jugador del mundo regrese a los terrenos de juego.