Messi y Benzema, sin pólvora

El fallo que humaniza a Leo Messi

sport.es

Se esperaba mucho de Leo Messi Karim Benzema en el clásico entre el Barça y el Real Madrid (0-0). El argentino y el francés llegaban compartiendo el Pichichi de LaLiga con 12 goles y pasaban por un gran momento de forma. Sin embargo, ninguno alcanzó el objetivo de ampliar su cuenta. El capitán del FC Barcelona, de todas formas, fue el que estuvo más cerca de anotar. El ‘9’ del Real Madrid, pese a batallar los 90 minutos, apenas remató a puerta.

Ambos reservaron la pólvora para otras ocasiones. En el caso de Messi, para el Barça-Alavés de este sábado (16.00 horas) y en el de Benzema, para el Madrid-Athletic (21.00 horas) del domingo.

Sujetados

Tanto Messi como Benzema fueron objeto de una estrecha vigilancia. ‘Secar’ a los máximos realizadores del campeonato era uno de los objetivos prioritarios de Ernesto Valverde y Zinedine Zidane. La zaga azulgrana cumplió a la perfección porque solo dejó rematar al delantero galo del Real Madrid en una ocasión, concretamente en el minuto 10, cuando recogió una asistencia inverosímil de Isco de tacón, cayendo y entre las piernas de Piqué. El remate de Benzema, desde la frontal, fue tímido y no exigió mucho de Ter Stegen.

Messi, por su parte, también ensayó poco los disparos a puerta. En el primer tiempo una de sus acciones más destacadas fue una asistencia a Jordi Alba en el minuto 41. El centro del lateral no llegó a rematarlo Suárez cuando s e encontraba en inmejorables condiciones.

En el segundo tiempo el crack argentino estuvo mejor. Participó más y no estuvo tan alejado del balón. En el minuto 60 estuvo muy cerca del gol, pero el balón, incomprensiblemente, se le fue. En el 67 lanzó una falta que Casemiro había cometido sobre Suárez. El capitán, en este segundo periodo, protagonizó más conducciones y pisó más el área del Real Madrid, generando pánico entre la zaga visitante, pero no pudo concretar ninguna acción con un gol o una asistencia ganadora. Messi, en su partido 704, jugó su clásico 42 e igualó a Xavi como el culé con más partidos de la máxima.