El mejor Dembélé en el momento más caliente

Cuando peor lo está pasando el Barça, en esta 'minicrisis' de la 'Xavineta' tras una evolución muy positiva, Ousmane Dembélé se ha convertido prácticamente en un oasis. El galo, implicadísimo con el proyecto del técnico de Terrassa, ha sido el único que ha dado soluciones en ataque cuando el equipo estaba más atascado. El mayor ejemplo lo vivimos ayer en el Camp Nou ante el Cádiz. Ousmane se convirtió en el principal argumento ofensivo. Encaró una vez tras otra y fue un incordio permanente en ese costado derecho.

Ese nivel de confianza en si mismo (unido a su buen estado físico, algo que no le había acompañado hasta ahora en el Barça) han hecho que el de Vernon esté rindiendo mejor que nunca desde su aterrizaje allá por el verano de 2017. No rehúye la responsabilidad, pide todos los balones, tiene una personalidad que desborda. Obviamente no es el mejor indicio que sea de los pocos argumentos ofensivos que está funcionado bien. Hace un par de partidos que el equipo de Xavi está atascado.

TODO POR DECIDIR

Este espléndido momento de forma (completó 13 regates ante el Cádiz; ningún jugador de las 5 mejores ligas europeas había completado más de 11 regates en un solo partido esta temporada) llega cuando entramos en la recta final de su contrato con el Barça. Estas próximas semanas serán cruciales, determinantes, para dilucidar si continúa subido a la 'Xavineta' o, por contra, firma un nuevo contrato con otro club europeo.

Sus buenas actuaciones obviamente no 'ayudan' a espantar a los moscardones que tiene volando a su alrededor el galo. Entre ellos, un PSG que sigue muy de cerca su situación.