Luis Suárez, un mordisco y dos zarpazos

Genio y figura, ése es Luis Suárez y volvió a dejarlo claro en el Italia-Uruguay, para que el que quiera ficharlo, sea Barça o Real Madrid, se atenga a las consecuencias. El delantero uruguayo no marcó esta vez, pero rompió el partido, con las dos ocasiones que tuvo ante Buffon, pero sobre todo con su mordisco a Giorgio Chiellini, al que desquició.

En el primer tiempo, muy táctico por parte de ambos equipos, Luis Suárez tuvo pocas ocasiones para poner a prueba la poertería italiana. Había mucho en juego y el temor a que los italianos se pusieran por delante en el marcador hizo a Uruaguay un poco más conservadora de lo esperado.

Aún así, Luis Suárez fue protagonista en la única jugada clara de gol de esos primeros 45 minutos. Fue en el minuto 33,  tras una combinación por la banda izquierda del ataque celeste.

Pereira y Cebolla Rodríguez progresaron hasta enviar hacia Lodeiro; este combinó en la frontal habilitando a Suárez que forzó un mano ante Buffon un tanto escorado. El meta italiano desvió el toque del atacante del Liverpool y después, con unos reflejos impresionantes, se rehizo para despejar también el disparo de Lodeiro que había aprovechado el rechace. Aún así, Suárez había dejado claro lo poco que necesita para generar peligro.

El resto del tiempo durante este primer periodo estuvo moviéndose continuamente, intentando generar espacios y asociarse con Cebolla Rodríguez, Lodeiro y un Cavani no demasiado inspirado.

OTRA EN EL SEGUNDO TIEMPO

El delantero de Uruguay y del Liverpool volvió a demostrar en el segundo tiempo su mezcla de talento y agresividad, en lo bueno y en lo malo. Con más espacios para moverse, especialmente tras la expulsión de Marchisio en el minuto 59, Suárez empezó a enseñar los dientes, nunca mejor dicho.

En el minuto 65' recogió un balón perdido por Cavani para plantarse ante Buffon y lanzar un disparo raso con la derecha que el meta italiano desvió a córner con una mano excpecional.

Sin embrago, el momento decisivo del duelo estaba por llegar, cuando en el minuto 79 el delantero uruguayo mordió a su marcador, Chiellini, en el hombro. Este se revolvió y el árbitro solo se quedó con el codazo dell italiano. Casi a continuación llegó el 0-1 obra de Godín (81').

En la recta final, Luis Suárez (89') intentó forzar un último uno contra uno pero los defensores italianos abortaron su último contragolpe.

Ahora está por ver si la FIFA toma cartas en el asunto y decide estudiar la acción de Suárez sobre Chiellini; en ese caso, podría costarle muy caro si es sancionado. Una lástima teniendo en cuenta el esfuerzo que hizo para llegar al Mundial, operándose de urgencia de la rodilla.