Las peticiones de Valverde a Dembélé

Jordi Gil

Jordi Gil

Ousmane Dembélé está llamado a ser un jugador esencial en el entramado de Ernesto Valverde. El técnico estuvo esperando todo el mes de agosto el fichaje de un futbolista que aportara la profundidad que había perdido con la fuga de Neymar Junior al PSG. Dembélé fue el único crack que pudo contratar  el club blaugrana y Valverde se ha propuesto integrarlo a sus sistemas con la máxima celeridad.

El técnico es consciente de que no debe atosigar con un exceso de consignas. Por ello, le ha transmitido cuatro conceptos básicos a partir de los cuales debe desarrollar su talento. Dembélé empezó a aplicarlos ante la Juventus y desde el punto de vista táctico cumplió. Ahora le falta ganar en espontaneidad.

Las líneas juntas

Una de las ideas que ha aportado Valverde que ha transmitido no solo a Dembélé, sino también al resto de jugadores de banda, como Gerard Deulofeu, es que busquen asociarse por dentro. Los extremos deben asociarse, combinar por dentro y, de esta manera, el equipo está más junto. Evidentemente, si ven la opción clara, tienen la libertad de jugarse el uno contra uno en la banda, aunque no hay que hacerlo de forma alocada o descontrolada.

La combinación por dentro permite jugar con Leo Messi y Luis Suárez y que los centrocampistas se sientan más arropados. Este nuevo planteamiento hace que Iniesta o Rakitic se sientan más cómodos y el Barça se haya convertido en un conjunto mucho más fiable.

Factor sorpresa

El entrenador del Barça quiere que el equipo esté muy junto, pero que también sea capaz de sorprender. Una de las vías para hacer daño al rival puede ser con las diagonales de los futbolistas abiertos. En este sentido, la velocidad de Dembélé puede servir para coger la espalda a los zagueros rivales y generar mucho peligro. Además, con las diagonales también se permite que los laterales entren por detrás. En este sentido, Semedo debe atreverse mucho más en caso de consolidarse en el equipo titular. El portugués está asegurando cuando pasa del centro del campo y, por ahora, está más pendiente de defender que atacar. Las limitaciones técnicas del portugués, en este caso, también son un handicap.

Mezcla con Messi

Entre todos los factores, el primordial para que Dembélé funcione plenamente en ataque es su engranaje con Leo Messi.  El entrenador del Barça le ha encomendado al galo que sepa leer los movimientos del crack argentino. Es decir, que se vaya hacia el centro cuando Messi decida bascular hacia la derecha o que le arrastre defensas cuando el ‘10’ decida arrancar con el balón.

Estos movimientos fueron los que se vieron más claros ante la Juventus. El propio Leo colaboró guiando a su nuevo compañeros sobre el terreno de juego. El crack le dio muchas instrucciones para que el joven futbolista encaje cuanto antes mejor en el nuevo tridente.

Actitud defensiva

Además de posicionamientos ofensivos, Dembélé mostró una interesante faceta defensiva. El jugador tenía que abandonar la línea de cal para pegarse más al resto de centrocampistas en el  repliegue para acabar conformando un 4-4-2.  De esta manera, el propio Dembélé, Rakitic, Busquets e Iniesta formaban la línea de cuatro para la contención.

El ex del Borussia también ayudó a Semedo cuando se veía desbordado en el mano a mano. Dembélé llegó incluso a la línea de fondo propia en una internada de Alex Sandro. El jugador demostró que no se arruga y es agresivo cuando conviene para frenar a los rivales.

El Barça ha ganado con su fichaje a un futbolista capaz de contribuir a que el bloque pueda funcionar de una manera mucho más simétrica.