Kubo, ese zarpazo del Madrid al Barça que no cuaja

El jugador nipón continúa sin ligar su futuro a ningún club tras salir por la puerta de atrás de Mallorca

Llegó a bombo y platillo en 2019 como una de las promesas más firmes del fútbol mundial y después de haber tenido que irse de Barcelona por la sanción al fútbol base

¡Cuatro caños seguidos! Así ha sido el golazo de Take Kubo. ¡Qué locura!

¡Cuatro caños seguidos! Así ha sido el golazo de Take Kubo. ¡Qué locura! / Twitter

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A pesar de tener cara de adolescente, Takefusa Kubo ha cumplido ya 21 años. Continúa siendo muy joven, obvio, pero hace tanto tiempo que da vueltas por el fútbol profesional que nos da una impresión muy distinta. El caso es que el nipón, que ha terminado una cesión de una temporada en el Mallorca, no ha cuajado en ninguno de los préstamos en los que se ha visto envuelto hasta ahora.

Mallorca, Villarreal, Getafe y otra vez Mallorca. Tres temporadas en la élite en Primera (en una de ellas, la 2020/21, estuvo medio curso en Villarreal y el otro medio en Getafe) sin haber conseguido asentarse y 'regularizar' de alguna forma ese enorme talento que asesora. Cabe recordar que Kubo era una de las grandes perlas de la cantera azulgrana.

Repasemos brevemente su historia. Llegó a La Masia con 10 años, siendo alevín. Era 2012. Despuntó, se hinchó a marcar goles y a llenar 'highlights'. El Messi japonés, decían muchos. El problema es que llegó aquella famosa sanción de la FIFA al Barça y se fue, junto a otros niños extranjeros, al baúl de los recuerdos. Volvió a su país y se convirtió en profesional con apenas 16 añitos. Quemó etapas. Lo quemaron, probablemente. En cualquier caso, seguía apuntando muy alto y el Madrid quiso dar un golpe.  “Fiché por el Madrid porque tenía un plan de futuro deportivo para mí”, dijo en su momento. Se marchaba al eterno rival y en el Barça se temían lo peor. Que allí se convirtiese en una superestrella.

REGRESO A ESPAÑA, PERO AL ETERNO RIVAL

Eso fue en 2019 y, como comentábamos, desde entonces solo ha vivido cesiones. En Chamartín nunca se le ha considerado para formar parte del primer plantel. Tenía que foguearse, lógico. Un buen primer año en Mallorca, una mala primera mitad de curso 2020/21 en Villarreal. Y discreto tanto en el Getafe como esta última temporada en Mallorca, donde ha jugado 30 partidos oficiales, ha marcado dos goles y dado tres asistencias.

Ahora es un problema para Ancelotti. El italiano, obviamente, no cuenta con él para su plantilla campeona de Europa. Y, hasta ahora, no parece que vaya a haber movimientos. No le faltarán posibles destinos, pero se le está atragantando el fútbol profesional español. Tiempo, sin duda, tiene.