Copa del Rey

Koundé pone la primera piedra del triplete y planta al Madrid en la crisis

El francés desató la locura en la prórroga con un golazo espectacular para darle el 32º título de Copa del Rey a un Barça que sueña con ganarlo todo

Resumen, goles y highlights del FC Barcelona 3-2 Real Madrid de la final de la Copa del Rey

Christian Blasco

Christian Blasco

El Barça de Flick ya se ha hecho mayor y se ha ganado el derecho a ser favorito a todos los títulos. El equipo azulgrana se levantó de una crisis en la segunda parte que resucitó al Madrid y terminó alzando el título de la Copa del Rey con un héroe inesperado: Jules Koundé.

El Barça hizo alarde de la valentía que lleva caracterizando al equipo de Flick toda la temporada en toda la primera parte. Buscando el gol de manera incesante y sin dejar que el Madrid diera tres pases seguidos. Los blancos, además, se quedaron sin Mendy a los 8 minutos de juego por lesión, después de que Ancelotti decidiera arriesgar con él en el once.

Lamine, que sacó a la luz su nuevo look rubio, tardó en aparecer, pero cuando lo hizo fue para ser decisivo. Primero dejó al recién entrado Fran García roto y después estuvo a punto de hacer el primero del partido con un disparo raso que se fue rozando el poste de la portería de Courtois.

El '19' del Barça se convirtió en una pesadilla para la defensa de los blancos y certificó su buen momento en la jugada que abrió el partido. Lamine atrajó toda la atención como la estrella que es y desordenó al Madrid con una conducción dentro del área, antes de dejar la pelota para un Pedri que, completamente solo en la frontal, puso el balón en la escuadra para hacer un golazo que hizo que los presentes en La Cartuja se echaran las manos a la cabeza.

El Madrid apenas dio un par de pincelazadas de despertar tras el tanto azulgrana, con dos jugadas que fueron anuladas por fuera de juego (un gol de Bellingham y un penalti sobre Vinicius). Mientras tanto, el Barça estuvo cerca del segundo con un balón que se estrelló en el palo tras un córner.

Ancelotti puso todo su arsenal en el campo en la segunda parte con la entrada de Mbappé por un Rodrygo desaparecido y cambió por completo el partido. El Barça brillante de la primera parte desapareció y empezó a perder balones en zonas delicadas.

Szczesny empezó a tener que emplear al máximo para detener las acometidas de los blancos, mientras Raphinha se desesperaba con varios disparos cruzados que se le fueron desviados.

Final Copa del Rey: FC Barcelona - Real Madrid, en imágenes

Final Copa del Rey: FC Barcelona - Real Madrid, en imágenes / Valentí Enrich

El mal momento del Barça se tradujo en el empate del Madrid, con una falta muy ajustada al palo de Mbappé que sorprendió a Szczesny. El equipo de Flick se derrumbaba por momentos y la remontada se consumó a balón parado con un remate de cabeza de Tchouameni en el corazón del área.

La segunda parte del equipo azulgrana resucitó por completo a un Madrid que parecía muerto. El equipo de la Ciudad Condal parecía no tener respuesta a la debacle, hasta que volvió a aparecer una genialidad de Lamine Yamal, con un pase medido y que solo podía hacer él para que Ferran, más rápido que Rüdiger y Courtois, se anticipara y pusiera el empate.

La acción de Asencio sobre Raphinha

La acción de Asencio sobre Raphinha / SPORT.es

El gol volvió a levantar al Barça en un polémico final de los 90 minutos, con un penalti no señalado sobre el propio Ferran Torres y otro de Asencio sobre Raphinha que fue anulado por el VAR en la última jugada del partido, causando la indignación de los futbolistas de Flick.

La prórroga reflejó el cansancio de los dos equipos, lo que provocó malas decisiones de los jugadores. Ferran y Brahim fallaron buenas ocasiones y fue Koundé, a cuatro minutos del final, el que puso todo el estadio patas arriba con una acción que entra directamente en la historia del Barça.

Anticipándose a Brahim desde atrás, conduciendo hasta la frontal y sacándose un disparo a la base del poste imparable. Un golazo inapelable del francés para desatar la locura ante la incredulidad de sus propios compañeros con lo que acababa de pasar. Un gol que le da otro título más a un Barça que pone la primera piedra para el triplete e instaura el estado de crisis en el Real Madrid.