El 'método Koeman': constancia y mano izquierda

Koeman asume que no tendrá muchos días de tranquilidad en el banquillo del Barça

 Koeman bromeó sobre la convulsa actualidad del equipo / sport

Toni Juanmartí

Toni Juanmartí

Ronald Koeman y su hoja de ruta avanzan sin prisa pero sin pausa. El técnico holandés analizó muy bien cuáles son los aspectos que cree que están fallando en el Barça y una de sus obsesiones es elevar la intensidad de su equipo. No pretende hacerlo disfrazándose de 'sargento', tampoco entrenando sin balón, pero sí cambiando costumbres. Ronald entiende que a la plantilla le venían fallando los hábitos en los entrenamientos: tanto en cantidad como en calidad.

Muchos jugadores se sorprendieron durante la pretemporada del ritmo exigido en las sesiones. Koeman y su 'staff' están muy encima de la plantilla, no solo en ejercicios genéricos, sino también en otros que antes se hacían de un modo más distendido. El holandés cree en el tópico de "se juega como se entrena".

Ronald no ha querido entrar en el vestuario como el 'poli' malo. Es más, de puertas hacia dentro, destacan la sinceridad, humildad y buen trato del técnico en los cara a cara con los jugadores. Incluso ha sorprendido en alguna ocasión con sentido del huumor. Y es que Koeman no cree que para exigir intensidad tenga que venderse como el 'enemigo' del vestuario. Más bien lo contrario.

El técnico ha explicado a la plantilla la importancia de alcanzar un estado de forma óptimo, y eso no se consigue a corto plazo, sino a largo plazo. No es cuestión de entrenar muy fuerte, sino de hacerlo de forma constante a una intensidad adecuada. Además, el holandés insiste en que son los propios jugadores los primeros beneficiados en competir con un tono físico adecuado. De ahí que, por ejemplo, esta semana no haya programado ni un solo día de fiesta. La plantilla se entrenará todos los días, si bien es cierto que el hecho de jugar jueves (Celta) y domingo (Sevilla) contribuyen a ello.

Koeman piensa a largo plazo y tiene claro que uno de los objetivos principales es cambiar algunos hábitos que quizá se habían descuidado en los últimos tiempos. De ahí que, por más que se obtengan buenos resultados, el holandés no bajará el ritmo.