Julián Araujo: "El Barça es otro mundo. Intento seguir a Jordi Alba"

El lateral mexicano ha explicado su llegada a Barcelona y como está viviendo la situación de no poder jugar

"Es un sueño cumplido de niño" asegura un Julián quien trata de imitar a Jordi Alba y aprender de su compatriota y entrenador, Rafa Márquez

Julián Araujo, nuevo jugador del FC Barcelona

SPORT.es

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Fue uno de los grandes nombres en el último día de mercado invernal y pese a que no pudo completarse su fichaje por el Barça, Julián Araujo ya se encuentra en total dinámica en el club azulgrana. El lateral mexicano, que se encuentra con su selección, ha hablado sobre su adaptación y la nueva situación que está viviendo en lo que asegura ser "un sueño cumplido desde niño".

18 segundos dejaron a Araujo sin poder estar jugando actualmente en el filial azulgrana, aunque a día de hoy le resta importancia al asunto. "Estaba frustrado, no había nada que pudiera hacer al respecto. Mi parte estaba hecha. Esa es una de las cosas que he aprendido a lo largo de mi carrera, es simplemente manejar lo que puedes controlar" asegura en ESPN.

A la espera de ver la resolución final del tribunal, el lateral del Barça se muestra entusiasmado de poder estar en un club como el Barça, que asegura ser "otro mundo". "Siempre tienes que estar alerta, siempre tienes que estar listo, esperando lo que va a pasar a continuación, si estás defendiendo, el ritmo es muy, muy alto". En su aún proceso de adaptación, Julián asegura que se respalda en dos grandes figuras en el día a día en Barcelona; Jordi Alba y Rafa Márquez.

"Intento imitar sus movimientos. Lo admiro desde que era niño y trato de preguntarle todo lo que se me pasa por la cabeza. Ha tenido una carrera increíble" explica el mexicano sobre su relación con el lateral azulgrana.

Su otro gran apoyo en Can Barça es Rafa Márquez, el entrenador del filial. "En los entrenamientos, solo miro hacia atrás y pienso 'wow'. Sé que fue un gran futbolista, por la forma en que pasa sus días, la forma en que nos habla" asegura sobre su compatriota. "Ha sido genial conmigo, ha tenido algunas palabras conmigo sobre en qué necesito trabajar, qué es lo que estoy haciendo bien, qué puedo hacer mejor y cómo puedo hacerlo mejor" explica un agradecido Julián.

El sacrificio de sus padres

Pero el camino de Julián hasta llegar a ser futbolista profesional no ha sido nada fácil y sus padres jugaron un papel fundamental tratando de hacer todo lo posible para que pudiera cumplir su sueño, "No estaría aquí sin ellos, por todos los sacrificios que hicieron". Hijo de padres granjeros, admite de las dificultades que vivieron en momentos anteriores y como tuvieron que sacrificar horas y dinero por él.

"Poder estar aquí es increíble, especialmente viniendo de donde vengo. Lompoc es una ciudad que se pasa por alto y no muchos niños tienen oportunidades" explica un Araujo que bromea con su adaptación con el catalán. "No es difícil, pero habrá momentos en que hablan muy rápido, a veces cambian sus palabras al catalán y los miro raro".