Así juega Pablo Páez 'Gavi', la nueva joya de la Masia

El centrocampista de Los Palacios sorprendió en su primera titularidad con el Barça B

Técnico, atrevido y con carácter, 'Gavi' es una de las apuestas más en firme que tiene la Masia de cara al primer equipo

'Gavi', en el derbi ante el RCD Espanyol

'Gavi', en el derbi ante el RCD Espanyol / Valenti Enrich

Albert Rogé

Albert Rogé

Pablo Páez Gaviria. Conocido deportivamente como ‘Gavi’. Se trata de un centrocampista de solo 16 años que este domingo se dio a conocer para gran parte de la afición del Fútbol Club Barcelona. Lo hizo en el derbi de filiales. En su primera titularidad bajo las órdenes de García Pimienta. Exhibición la suya. Pero no es nada nuevo para los que hace años que le seguimos la pista al jugador de Los Palacios.

En el año 2017, un servidor escribía lo siguiente: “En la temporada 2015-16, el conjunto azulgrana fichó a Pablo Páez ‘Gavi’. Se trataba de un jugador que llegaba con la etiqueta del mejor alevín del fútbol andaluz. Procedente del Betis, ‘Gavi’ empezó su andadura en el mundo del fútbol con 6 años en el club La Liara Balompié. Tenía un año menos que el resto pero ya iba sobrado. Su fútbol no pasó desapercibido y el Sevilla vino a buscarle. Él dijo que no, quería jugar en el Betis y así fue. Allí se convirtió en un jugador muy atractivo para el espectador. Su carácter fuerte le hacía no arrugarse ante nadie y luchar cada balón como si fuera el último. Cuando el balón llegaba a sus pies, parecía que el mundo se detenía y hacía con sus rivales lo que le venía en gana. Con todo esto, Barça y Madrid lucharon por su incorporación y los azulgranas se llevaron el gato al agua. En el mes de enero debutó con el Alevín A ya que fue el año de la sanción FIFA. El de Los Palacios empezó su residencia en La Masia y es íntimo amigo de Xavi Simons, con el que comparte casi todos sus momentos fuera de los terrenos de juego”.

Cuatro años después, se pueden suscribir casi todas de esas características que definen su juego. Con una gran diferencia. Ahora compite contra jugadores más grandes que él. Sin ir más lejos, esta mañana lo hizo ante el filial del RCD Espanyol. Y no pareció importarle. Al contrario. ‘Gavi’ se hizo el amo y señor del centro del campo, cogiendo responsabilidad con balón con jugadas espectaculares y trabajando como el que más en defensa. Eso tiene enamorado a García Pimienta. Su compromiso. Sus ganas de triunfar. Nada ni nadie le detiene en su camino hacia el primer equipo. Es pronto, sí, pero hay motivos para ilusionarse. De momento, calma y a destacar en el filial. Lo otro llegará solo. Es uno de los elegidos y el Barça tiene una gran suerte de contar con él. Renovado este verano, su progresión es meteórica. Lo mejor aún está por venir.