José Elías, presidente de Audax: "Yo en el Barça no tengo nada que rascar"

El empresario badalonés nos recibe en su casa el día después de que Laporta tomara posesión de la presidencia del FC Barcelona. Gracias a su aval, y al del vicepresidente de su empresa, Audax, fue posible. Cuenta en SPORT los pormenores de esta historia.

Usted fichó para Audax a Eduard Romeu, actual vicepresidente económico del FC Barcelona... 

Sí, en 2015. Eduard es un hombre muy sentimental, muy culé, muy catalán y también un verdadero mago de las finanzas, un gran experto del sector bancario.

Entonces la estrategia económica del FC Barcelona está en buenas manos.

Sin duda, es un crack. Laporta ha acertado de pleno dándale esa     responsabilidad.

Su vinculación con Laporta, dice, nace por una promesa...

Así es. Cuando fiché a Eduard me pidió cuatro cosas: un sueldo, vivir en un hotel, ir al trabajo en taxi y financiarle la campaña electoral al Barça si Audax llegaba a 1.000 millones de euros de capitalización. 

Y llegó a los mil millones...

Hace un año y medio, sí. Eduard llamó a mi puerta y me dijo: “¿Qué hay de lo mío?”. Tuve que cumplir mi promesa, claro. Antes de tirarnos a la piscina y crear una candidatura solos, le dije que fuera a hablar con los diferentes precandidatos que sabíamos que se estaban postulando.

¿Hablaron con Víctor Font?

Hubo un contacto, pero no nos gustó lo que nos respondió.

¿Toni Freixa?

Tampoco. No me atraía su proyecto. Es un buen comunicador, pero le pasa como a Cristiano Ronaldo con Messi. Ha coincidido en el tiempo con Laporta. Con Farré y Laporta sí nos sentamos a hablar.

¿Cuándo se reunieron con Laporta?

Hace algo más de un año.

¿Y le ofrecieron entonces su apoyo económico?

Yo no iba a poner dinero en el Barça. Solo le ofrecimos ayudarle a conseguir el aval y estudiar la posibilidad de que Eduard entrara en la junta directiva, porque era uno de sus grandes sueños.

¿Qué impresión le causó?

¿Laporta? Me gustó mucho. Somos muy parecidos, salvando las distancias, claro. Tiene mucho carisma, es un líder nato y dice las cosas como son.

¿Por qué Eduard Romeu no estaba en la primera tanda de directivos, en la presentación?

Laporta es quien decide. Este juguetito es suyo. El iba haciendo sus cábalas y adaptando el proyecto como creía oportuno.

No tuvo más remedio que contar con vuestro aval para conseguirlo...

Él decidió cuándo era el momento más adecuado para solicitar nuestra ayuda.

¿Entró Eduard por Giró?

No, porque nosotros hemos conocido a Jaume Giró de nuestros encuentros con Laporta y la gente de la candidatura.

¿Giró lideraba el tema del aval?

Creo que sí.

¿Él apostaba por el fondo de inversión americano?

Lo desconozco. Lo que sí sé es que había varias alternativas.

¿Ustedes aparecieron a alguna hora para dar el aval?

¡Qué va! Nosotros presentamos nuestros papeles y contraaval hacía muchas semanas ante el Banc Sabadell.

¿No ha habido improvisación?

En absoluto. Ha sido una operación compleja, sí, pero no se hizo el sábado y domingo, como se ha dicho por ahí.

¿Cuánto dinero han puesto?

Eso es relevante. El Barça no es una sociedad. Poner diez millones no te da más derecho que el que pone dos, por ejemplo. Mi ayuda a Laporta ha sido desinteresada, da igual veinte que treinta. 

¿Es cierto que han exigido por escrito a Laporta control de las decisiones de económicas?

Es falso, no hay documento alguno. Y no puede haberlo.

Entonces no ha pedido nada a cambio de su aval...

Esto es muy simple. He cumplido mi promesa de ayudar a mi amigo a ser directivo del Barça. He puesto mi granito de arena. No hay más. Yo tengo empresas que venden luz y servicios médicos. Yo tengo muy poco que rascar en el Barça. Nada.

Su amigo ha hecho realidad sus sueños...

Laporta ha acertado poniendo a Eduard Romeu de vicepresidente. Él es como un padre para mí. Cogió a un empresario que estaba arruinado hace diez años con una empresita y ha montado un imperio. El Barça tiene que aprovechar todo el talento que tiene Eduard Romeu.

¿No les da miedo la situación económica del Barça?

Es para estar ocupado, pero no preocupado. El Barça es una marca mundial, una máquina de generar dinero brutal. En el club hay talento suficiente para revertir la situación. Hay un nuevo CEO y es él quien debe llevar las riendas.

¿Le gustaría un día ser presidente o directivo del Barça?

No, no tengo ningún interés, de verdad. Eso sí, si me piden ayuda o consejo, yo, encantado. Eso, ve, me haría ilusión, ayudar.