Jordi Alba también jugó el clásico
Salió disparado del banquillo para abrazar a Balde tras el 2-1, levantó a caballito a Gavi y fue el primero en separar a Arnau Tenas de Carvajal
Relegado al banquillo y sin minutos en los últimos cuatro partidos, vivió el Barça-Real Madrid con intensidad y compañerismo
Jordi Alba no está pasando una buena época en el Barça. La derrota en Almería fue el último partido que tuvo minutos, pues no ha tenido oportunidad en los cuatro siguientes (Real Madrid en Copa, y Valencia, Athletic y Madrid en Liga).
Para alguien acostumbrado los últimos años a jugarlo prácticamente todo no debe ser nada fácil presenciar un clásico desde el banquillo, pero lo vivió con intensidad, pasión y compañerismo. Ha dejado imágenes icónicas para el recuerdo.
El saludo con Xavi
En el túnel de vestuarios, en los prolegómenos del partido, las cámaras de televisión captaron como antes de la salida de los jugadores al césped, el técnico azulgrana, Xavi Hernández, vio llegar a Alba y le espero para chocarle la mano. El lateral estuvo departiendo con algunos internacionales del Real Madrid, con los que esta vez no podrá compartir concentración con la Roja.
Carrera para felicitar a Balde
El 2-1 del Barça sobre el Real Madrid en el tiempo de añadido fue una locura en el Spotify Camp Nou. Alba fue el más rápido de los jugadores del banquillo, salió como un poseso, entró al césped y se fue directamente a abrazar a Alejandro Balde, el autor de la asistencia a Kessie.
Ambos evidenciaron que la rivalidad es sana y de hecho, Balde siempre ha manifestado que Jordi es su referente en el lateral izquierdo y le está muy agradecido por el apoyo y los consejos.
Paró una trifulca
Al terminar el partido, los jugadores del Barça formaron un corrillo, pero Dani Carvajal se fue directamente a por el tercer portero azulgrana, Arnau Tenas, que no se arrugó.
Alba fue el primero en verlo y se puso entre los dos para interceder. Después llegó como una flecha Araujo para acabar de separarlos y el uruguayo incluso cayó al suelo por algún golpe en el barullo que se formó.
Reconoció el gran trabajo de Gavi
Calmados los ánimos, el equipo se fue a celebrar la victoria con la Grada d'Animació y cantar juntos el ya clásico 'Un día de partit'. Alba se fue hacia Gavi y lo levantó a 'caballito' en una de las imágenes más icónicas que nos dejó el clásico, reconociendo de esta manera el gran trabajo del incansable centrocampista y evidenciando su buena relación con los jóvenes.
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