Insustancial partido de André Gomes en su debut como titular

Si medimos y juzgamos la aportación de un futbolista por su influencia en el juego colectivo del equipo, tendremos que admitir que la de André Gomes dejó mucho que desear en el Wanda Metropolitano. Cuando uno lleva puesta la camiseta del Barça no puede ser tan timorato ni contemplativo, y mucho menos ante un Atlético de Madrid que, si tiene una virtud, es la de la agresividad, anticipación y presión. Y al portugués le falta un poco de todo eso.

Ernesto Valverde le confirió la titularidad, lo que significó una mayúscula sorpresa en la alineación ya que André Gomes venía contando muy poco para su técnico, de ahí que llamara la atención que echara mano de él en un partido de tanta exigencia y complejidad.

El portugués ocupó en la primera mitad una demarcación que ya había experimentado con Luis Enrique, en la banda derecha, bien de extremo bien de interior. Una banda a la portuguesa junto a su compatriota y compañero de selección Semedo. André Gomes comenzó más preocupado de amarrar a Filipe Luis y de evitar sus subidas por banda, que de cualquier otra cosa. No le vimos encarar, no le vimos buscar el uno contra uno, no le vimos desequilibrar y lo mejor que hizo fue... pasar hacia atrás. Es decir, mínimo riesgo.

Es verdad que en un par de ocasiones buscó el desmarque llegando desde la segunda línea, pero no pudo acabar ambas acciones en condiciones. Habrá que admitir que para Valverde, el portugués estaba cumpliendo a la perfección y a plena satisfacción porque lo mantuvo en el terreno de juego los noventa minutos y jugó más que Iniesta y Rakitic, algo difícil de entender.

Precisamente con los primeros cambios introducidos por Valverde, con la salida del campo de Iniesta, André Gomes dejó la banda derecha y se fue a la izquierda. Fue en ese periodo de tiempo donde más a gusto se encontró el portugués, cuando el partido se 'rompió' y ambos equipos dejaron de jugar tan encorsetados. Con más espacios, con marcajes menos férreos, tanto Andrés Gomes como el resto de sus compañeros subieron de nivel, acabando de dominar al Atlético de Madrid en el tramo final de una contienda muy igualada.