La increíble cláusula que separaría a Rabiot del Barça

Uno de los principales escollos para que el Barça y Adrien Rabiot acaben cerrando el acuerdo definitivo no tendría un origen económico, sino deportivo. El todavía centrocampista del PSG pediría que se incluya una cláusula en su contrato que impida que le hagan jugar en la posición de 'seis', la que en el conjunto blaugrana es habitualmente la de mediocentro que ocupa Sergio Busquets.

Se trata de una exigencia que difícilmente puede aceptar ningún club pues estaría condicionando el trabajo del entrenador de la plantilla así como al resto de compañeros. Y no parece que el Barça pueda aceptar, ni remotamente, una condición como esta para firmar a un futbolista.

Así lo afirma el periodista francés @abdellahboulma en su cuenta de Twitter, quizás haciendose eco de los debates futbolísticos que ha protagonizado Adrien Rabiot a lo largo de los últimos años:

El caso es que, más allá de lo extraño que resulta que Adrien Rabiot pueda exigir una medida así para firmar un contrato por un nuevo club, no es una asunto menor, ni mucho menos, sino que tiene cierta base real.

En el PSG ya han tenido que lidiar con este asunto. Thiago Motta era el futbolista que habitualmente cumplía con estas funciones de pivote, de manera que Rabiot podía jugar en otras demarcaciones en el centro del campo con mayor libertad de movimientos. Sin embargo, los técnicos debían recurrir a él cuando no estaba disponible Motta.

SUS MOTIVOS

En una entrevista concedida a 'Le Figaro' unas temporadas atrás, coincidiendo con uno de los duelos frente al Barça en la Champions, Rabiot explicaba el tema pues en esa ocasón debía suplir en esta demarcación al sancionado Thiago Motta, ahora ya retirado.

"Mi posición favorita es de interior. Puedo proyectarme en ataque, estoy más libre con el balón. Ahora,el entrenador me pide que juegue más retrasado como pivote; lo hago para el equipo y tal vez para preparar el partido de Barcelona. Es una posición en la que jugaba de joven, en el centro de formación. Cuando juegas como pivote es preciso ser eficaz, jugar rápido, no subir al ataque demasiado porque también estás para ayudar a la defensa. A mi me gustar subir al ataque a menudo... No me importa jugar allí, pero ya tendré tiempo en mi carrera para retrasar mi posición".

TUCHEL, TAMBIÉN

Thomas Tuchel, el actual entrenador del PSG, intentó casi hasta el final conseguir la continuidad de Rabiot en el club parisino. Y parte de su táctica fue liberar a Adrien de la responsabilidad de jugar como 'seis'.

En septiembre, en una entrevista en 'L'Équipe', Tuchel reflexionaba sobre sus problemas para armar esa posición de pivote. "¿Si la ausencia de un centrocampista puede marcar la diferencia en la Liga de Campeones? Por supuesto. Lo que me preocupa es el impacto físico de un 'número seis'. Rabiot puede cumplir esa función, pero es un jugador con una vocación más ofensiva y al que le gusta tomar riesgos", avisaba el técnico alemán.

Y añadía Tuchel sobre Rabiot: "Me gusta mucho, pero no estoy seguro de que su perfil sea el de un 'número seis'. No es una cuestión de su talento: podría hacerlo, sin duda, pero no basta con tener las condiciones físicas o técnicas. También se debe pensar como un 'seis'. Está aprendiendo, sabe que tiene toda mi confianza".

BUSQUETS Y DE JONG

El caso es que Tuchel ha utilizado al veterano Lass Diarra en esa demarcación hasta que, a sus 33 años, el veterano internacional ha anunciado que se retira. Un anuncio que ha coincidido con la marginación de Rabiot desde el pasado mes de diciembre al no renovar su contrato y deja en precario al PSG en esa demarcación.

En clave blaugrana, más allá de esa supuesta cláusula 'anti seis', el Barça estaría cubriendo ese eventual problema con otro fichaje, el del jugador del Ajax Frenkie De Jong. El 'ajacied' sí que es un mediocentro al uso que también se adaptaría al eje de la defensa si es necesario; y sería el relevo de futuro para Sergio Busquets.