El 'ilusionista' Conte intenta confundir al Barça

El Chelsea juega al despiste. El planteamiento del conjunto londinense es una absoluta incógnita de cara a la vuelta de octavos de final de Champions League en el Camp Nou. Antonio Conte no ha adelantado ni un ápice del esqueleto de equipo que podría presentar el miércoles y en estos partidos previos al 'match ball' tampoco se han podido extraer conclusiones sobre qué ataque (la defensa sí parece más clara) formará de inicio. En la ida, el técnico italiano apostó por una fórmula que podía parecer de primeras más conservadora sin un '9' referencia, pero que terminó saliendo bien y dándole incluso a los ''blues' el dominio y las ocasiones en algunos tramos de partido.

Y lo lógico es pensar que el ex del Chelsea y de la 'azzurra' insistirá de nuevo con ese esquema en el que los hombres más adelantados son Willian, pero en el que ninguno de los dos está fijo en la línea de ataque. Bien flanqueados por Cesc, Kanté y Pedro y con la ya conocida defensa de cinco con Marcos Alonso y Moses ejerciendo en muchas ocasiones casi como extremos, Conte espera que las cosas vuelvan a funcionar tan bien como en el duelo de ida. Y no lo decimos nosotros, lo dijo él mismo en rueda de prensa tras ganar al Crystal Palace: "Creo que en la ida hicimos un gran partido, casi el partido perfecto". Una frase que no dice nada y dice mucho en visos del partido más importante de la temporada (que ha tenido y que tiene por delante vista su situación en la Premier).

"Hablaré con los jugadores para encontrar el plan correcto"

Preguntado sobre el posible once para el partido en el Camp Nou, el italiano echó balones fuera: "No será fácil, tenemos que saberlo y tenemos que tratar de encontrar la solución adecuada para jugar ese partido. La mejor manera a veces es hablar con los jugadores y tratar de encontrar juntos el plan correcto para jugar el encuentro".

Con dos nueves puros como Giroud y Morata a su disposición, las alineaciones del cuadro de Stamford Bridge de los últimos partidos (tres desde que se enfrentara al FC Barcelona) no dan ninguna pista ni aclaran el camino hacia la alineación que tiene en mente Conte. Cinco días después de medirse al Barça, el Chelsea visitó Old Trafford con varios cambios en su alineación. Morata fue titular en punta y Drinkwater entró por Cesc en el doble pivote. Ante el Manchester City en el Etihad volvió a apostar por la fórmula que le había dado buen resultado frente al conjunto azulgrana (Hazard y Willian como falsas referencias) y en su último compormiso ante el Palace fue Olivier Giroud, flamante fichaje del mercado invernal, el que se estrenó como titular en la Premier League (Morata se quedó en el banco y entró en el minuto 72 por el francés).

Tres encuentros y tres formaciones de ataque distintas. Como decíamos, tiene un buen abanico de opciones el Chelsea para sorprender al Barça, pero la que parte claramente como favorita es la misma que utilizó su entrenador en la ida. Movilidad absoluta para Hazard y Willian, que en ciertos tramos fueron un quebradero de cabeza, sobre todo el brasileño, con el que nadie contaba quizás en la fiesta y que se autoinvitó y acabó siendo el alma y la principal amenaza. Ojo con él. Y con las confusiones y los cambios de decisiones de última hora.