Ilaix no podrá jugar el Barça-Valladolid si ve la amarilla con el filial

El centrocampista acumula cuatro tarjetas amarillas con el Barça B y este sábado jugará frente al Alcoyano

Una sanción le impediría tener minutos el próximo lunes, aunque está por ver si Ronald Koeman le convoca en esta ocasión

Ilaix Moriba: "Sueño en dar lo mejor de mi al equipo"

Ilaix Moriba habló al acabar el partido en los micrófonos de BarçaTV y comentó su primer tanto con el primer equipo /

German Bona

German Bona

Ilaix Moriba jugó su último partido con el Barça B el pasado 21 de febrero. Marcó un golazo en la goleada 6-0 a L'Hospitalet. Los siguientes partidos los jugó con el primer equipo azulgrana, ya arrastraba cuatro tarjetas amarillas con el filial (desde el 20 de diciembre en el partido contra el Cornellà) y no se quisieron correr riesgos. Además, el de Conakry convenció a Ronald Koeman, marcó un golazo en El Sadar, contribuyó a la remontada copera del Camp Nou frente al Sevilla y le dio una asistencia a Dembélé en Anoeta.

Este sábado, regresa con el equipo de García Pimienta para arrancar la segunda fase frente al Alcoyano. La situación en el primer equipo ya no es tan angustiante como hace unas semanas, la vuelta de Piqué y la de Sergi Roberto parece inminente, y se ha decidido que Ilaix ayude al Barça B. Está por ver si Ronald Koeman le convoca o no contra el Valladolid, hay tiempo más que suficiente al jugarse el partido en lunes, pero solo podrá entrar en la lista si no ve la amarilla en el partido del Estadi Johan Cruyff frente al equipo que protagonizó el sonado Alcoyanazo.

Trece partidos aguantando como apercibido

El motivo es que la suspensión la tiene que cumplir, lógicamente, con el Barça B, que es donde acumularía las tarjetas, pero como el filial no vuelve a jugar hasta el próximo fin de semana, en Ibiza, antes tampoco podría defender Moriba la camiseta del primer equipo. Deberá ir con mucho cuidado, y de hecho, se da la circunstancia que desde que está apercibido, el de Conakry ha participado en ocho partidos con los 'grandes' y en cinco con el filial sin ver ninguna tarjeta más. Ha aprendido a convivir con esta circunstancia.