Guardiola: "Cuando dudo, siempre pienso: '¿Qué haría Johan?'"

Toni Juanmartí

Toni Juanmartí

"Si juegas la final de la Champions en Wembley y no disfrutas, es que eres tonto". Con esta cita de Johan Cruyff dio el periodista Antoni Bassas pistoletazo de salida al primer acto de homenaje de Johan Cruyff, llamado "Salid y disfrutad". Fue precisamente esto último lo que hicieron este miércoles por la tarde tanto Pep Guardiola, Ferran Adriá y Sergi Pámies como los más de 300 asistentes que llenaron el Auditori de Mediapro, en Barcelona, para recordar la figura del mito holandés, fallecido el 24 de marzo de 2016.

El técnico del Manchester City valoró en primer lugar cómo la figura de Johan le influye en su día a día. “Johan sale siempre en mis conversaciones. Cuando estoy solo, siempre le recuerdo, sobre todo a nivel profesional. Pienso qué haría él, cosa que es imposible de sabe, sobre todo a nivel de gestión. Él era muy particular en la gestión con los medios, con los jugadores…”, analizó el actual técnico del Manchester City.

En su turno, el prestigioso 'chef' Ferran Adrià siguió la línea de Pep. “Para mí fue una referencia desde pequeño. Yo quería ser Johan Cruyff, y no Ferran Adrià. No hay día en el que no me acuerde de él", valoró.

Por su parte, el escritor Sergi Pàmies recalcó que la figura de Johan le anima a perder el miedo. “Nunca lo podremos hacer como él. Pero pienso que hay que ser lo más audaz posible y no tener miedo. Hay situaciones en las que te están intimidando. Y a mí, en esos momentos me viene Cruyff a la cabeza. Hay que ser creativo, audaz y no dejarse pisar”, comentó.

En una distendida charla ante la atenta mirada de exculés como Xavi Hernández, José Mari Bakero, Joan Laporta, Lluís Carreras o Eusebio Sacristán, entre otros, los tres protagonistas contaron divertidas anécdotas sobre Cruyff. Pàmies recordó cómo justificó Cruyff el flojo rendimiento de Prosinecki y Kodro en el Barça: "¡Y yo qué sabía que habría una guerra en su tierra", dijo el escritor imitando el habla del holandés.

Pese a mostrarse como una persona espontánea y de mucho humor, Guardiola recordó que en la intimidad, como entrenador, no todo eran risas. “Trabajar con él era tela marinera. Te llevaba al límite. Había momentos que te ahogaba. Pero nos abrió un mundo en el que él era único a la hora de explicarte las cosas. Por eso fue tan innovador. Todo lo que ha pasado en el Barça no se puede entender sin su figura. No por los títulos, sino por su personalidad, su carisma. Después, cuando yo fui entrenador, le vi como un abuelo. Se le notaba que estaba contento de que le fuera a visitar. Le llamaba mucho cuando estaba en el filial. Tenía la sensación de que no quería que me fuera. Se lo pasaba bien conmigo. Él te decía: 'A ese ponlo de lateral. A este tío échale'", relató Pep antes de desvelar otra anécdota.

"Un jugador del filial se fue a medio entrenamiento por un compromiso publicitario, y el fin de semana nos jugábamos el playoff. Se lo expliqué y me dijo: 'Ni se te ocurra ponerlo. Si no lo pones, verás que saldrá bien y ganarás'. Evidentemente, ganamos el partido", contó Guardiola.

Todavía sobre el carácter de Cruyff, Pep insistió en resaltar lo contundente que podía llegar a ser el holandés. “Cuando te decía algo, te cagabas. Intimidaba mucho. Jugaba mucho con darte cariño cuando no eras nadie y darte hostias cuando empezabas a salir en los periódicos”, desveló.

Sorprendió, y mucho, la respuesta que dio el técnico del Manchester City cuando se le preguntó cómo habría sido Johan entrenando a Messi. "Es una muy buena pregunta. Habríamos ganado, eso seguro. Creo que ambos son inteligentes. Al principio quizá habría habido un conflicto, pero seguro que se habrían acabado encontrando y habríamos ganado", valoró.

Por último, Sergi Pàmies resumió la máxima que, para el escritor, define la forma de actuar de Johan. "Le gustaba opinar de todo. A él le gustaba intervenir en la felicidad de los demás. Tenía opinión para todo", dijo Pàmies antes de que Antoni Bassas se animara con otra anécdota. "Un día le dije: 'Johan, mira: ha estallado la guerra y sube la bolsa'. Él me respondió rápidamente: 'Pues claro, la gente compra más comida y más armas. Normal'", relató el periodista para ejemplificar lo fácil que lo veía todo el eterno '14'. Y es que, tal como el propio Pàmies se encargó de recordar para cerrar el acto, "Johan tenía razón incluso cuando no tenía razón".