El Granada desquicia al público del Camp Nou

El Granada se adelantó a los dos minutos de partido y desde entonces los nervios se instalaron en el Camp Nou. El Barça no entró con buen pie y el 0-1 no ayudó al equipo, que además se vio perjudicado por las continuas pérdidas de tiempo del conjunto de Robert Moreno.

Y ese nerviosismo sobre el terreno de juego se trasladó también a la grada del estadio, que terminó pitando cada acción de juego a favor del Granada. El ejemplo más visible fue la lesión de Eteki. El jugador se tiró al campo por molestias, fue atendido en la banda por los servicios médicos y decidió entrar de nuevo al campo. Pero a los dos minutos volvió a tirarse sobre el césped del Camp Nou y hasta salió la camilla.

Tampoco ha ayudado a calmar los ánimos que Domingos Duarte se fuese al suelo por un manotazo y que Quini tuviera que ponerse la lentilla, y con ello parar el encuentro, sin que el árbitro le indicase que se fuese a la banda.

La primera mitad acabó con desventaja en el marcador para los de Koeman después de que el árbitro añadiera cuatro minutos de prolongación, un descuento que también la afición culé consideró como poco y pitó a Jaime Latre y al Granada cuando accedían a los vestuarios.

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