El gran problema del Bayern con Lewandowski

El Bayern de Múnich se ha encontrado con un gran problema con la negativa de Robert Lewandowski de negarse a renovar su contrato. El polaco tiene firmado hasta el 2023 y no solo no quiere ampliar esta vinculación, sino que quiere que el club acepte su traspaso al FC Barcelona. El conjunto bávaro por ahora se está viendo obligado a retener al futbolista contra su voluntad por un motivo principal: no tiene un relevo definido.

El Bayern tiene ahora un delantero top como es Lewandowski y no detecta en el mercado un sustituto de su nivel. El técnico, Julian Nagelsmann, ve las cosas distintas. Sabe que lidiar con un crack que se ha tenido que quedar a regañadientes puede conllevar situaciones incómodas en el vestuario. Por ello, el entrenador ha dado el visto bueno a los hipotéticos recambios.

Los dos nombres que gustan a Nagelsmann son Sasa Kalajdzic (Suttgart) y Patrick Schick (Bayer Leverkusen). El míster del Bayern entiende que por su perfil encajarían como arietes del Bayern y que tienen mucho margen de progresión bajo sus órdenes.

Las alternativas

Kalajdzic, de 24 años, es delantero del Stuttgart y, como a Lewandowski, solo le queda un año de contrato. Por tanto, sería una operación asequible a nivel económico, aunque el Bayern preferiría esperar este año y ficharlo libre en 2023.

Schick, de 26 años, milita en el Bayer Leverkusen y tiene más experiencia tras su paso por la Roma o el Leipzig, donde precisamente coincidió con Nagelsmann en la temporada 2019-20. El Leverkusen lo compró por 26,5 millones de euros en 2020 y tiene contrato hasta el 2025. Por tanto, la salida del checo sería mucho más compleja y costosa.

El hándicap llega por parte de los dirigentes del Bayern. El director general, Oliver Kahn, y el director deportivo, Hasan Salihamidzic, tienen dudas sobre estos futbolistas, sobre todo comparados con el nivel de Lewandowski.

La postura actual por parte de los mandatarios es continuar otro año con el polaco y el próximo verano plantearse el recambio. Sin embargo, Lewandowski no se resignará y continuará apretando para forzar su traspaso.

La tensión está asegurada en las próximas semanas y en el Barça existe la esperanza de que el Bayern acabe dando su brazo a torcer. Eso sí, el club bávaro quiere vender caro y el precio de salida de la negociación rondaría los 40 millones de euros. Una cifra muy alta por tratarse de un futbolista al que solo le resta un año de vinculación.