Un gol de Arturo Vidal retrasa el alirón blanco

El Barça pospone el alirón del Madrid

Francesc J. Gimeno

Francesc J. Gimeno

El Barcelona evitó que el Real Madrid pueda cantar el alirón de forma anticipada en su próximo compromiso ante el Granada después de sumar los tres puntos en Valladolid gracias a un solitario gol de Arturo Vidal en el minuto 15. El equipo de Quique Setién no supo matar el encuentro cuando tuvo la oportunidad y acabó sufriendo más de la cuenta en algunos momentos del segundo tiempo para mantener el resultado. Parece que los blaugrana son incapaces de completar un encuentro redondo y siempre acaban permitiendo que su rival tenga opciones de darle un disgusto, como volvió a suceder en el Estadio José Zorrilla. 

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Liga Santander 2019/2020

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Alineaciones
Valladolid
Masip, Moyano, Olivas, Javi Sánchez, Carnero (Nacho, 25'), Joaquín (Hervías, 46'), San Emeterio, Alcaraz (Enes Ünal, 46'), Kike Pérez, Óscar Plano (Waldo, 80') y Sergi Guardiola (Sandro, 61').
Barcelona
Ter Stegen, Semedo, Piqué, Lenglet (Araújo, 57'), Jordi Alba, Arturo Vidal, Busquets (Junior Firpo, 74'), Sergi Roberto, Riqui Puig (Rakitic, 57'), Griezmann (Luis Suárez, 46') y Messi.

El Barcelona se tomó muy en serio de salida su final en Valladolid, consciente de que un tropiezo en el José Zorrilla representaba dejar el título en bandeja al Real Madrid. Setién apostó de salida por una idea que ya había utilizado en algunos partidos antes del parón y alineó a Sergi Roberto como tercer central, de forma que Semedo y Jordi Alba se situaron como dos centrocampistas más. La propuesta funcionó y el equipo blaugrana tuvo el monopolio del balón durante la mayor parte del primer tiempo, obligando al equipo de Sergio González a jugar casi siempre en su campo y sin acercarse al área de Ter Stegen.

Los blaugrana se encontraron cómodos y no tardaron en poner a prueba a Masip. El primero en hacerlo fue Riqui Puig (5') con un remate con la zurda demasiado flojo a centro de Semedo. El lateral portugués se proyectó por su banda y protagonizó varias acciones de mérito. De hecho, intervino en la jugada del 0-1, aunque la mayor parte del mérito, como siempre, hay que atribuírselo a Messi, que se sacó del sombrero una asistencia magistral a Arturo Vidal al colar el balón entre dos zagueros rivales. El chileno definió con un disparo potente y cruzado que entró tras rebotar en el palo.

el plan funciona

El gol confirmaba que el plan estaba funcionando. A los blaugrana sólo les faltó a partir de ese momento la contundencia necesaria para dejar prácticamente sentenciado el partido con un segundo gol. Griezmann no estuvo afortunado en la primera de esas ocasiones, ya que remató muy mal tras recibir un buen centro de Semedo y ver cómo uno de los centrales del Valladolid fallaba en el despeje. Y Masip se interpuso en el camino del Barcelona en otras dos oportunidades. En la primera detuvo en dos tiempos una buena internada del lateral portugués y poco después evitó que Griezmann alcanzara un centro de Riqui Puig.

La pausa para la hidratación permitió que el equipo pucelano hiciera algunos ajustes y el panorama cambió. El Barcelona no aprovechó su momento y dio aire al Valladolid, que estuvo a punto de encontrarse el gol del empate en una jugada extraña en la que el novato Kike Pérez se plantó solo ante Ter Stegen después de un balón largo que peinó hacia atrás Lenglet. El jugador del Valladolid le ganó la partida a Piqué en la carrera, pero cuando se disponía a rematar la jugada delante del meta alemán, realizó una extraña maniobra. Acabó rematando fatal lanzándose al suelo y golpeando más el césped que el balón. De forma inesperada Ter Stegen no tuvo entonces demasiados problemas para resolver la jugada.

momento VAR

Antes del descanso aún hubo tiempo para el primer momento VAR de la jornada. Mateu Lahoz se hizo el sueco después de una dura entrada de Alcaraz a Arturo Vidal y despachó la jugada con una amarilla. El VAR también se desentendió a diferencia de lo que había ocurrido en el derbi en las expulsiones de Ansu Fati y Pol Lozano. Una prueba más, la enésima, de la disparidad de criterios con la que trabaja el videoarbitraje.

El descanso confirmó que el Valladolid no estaba dispuesto a rendirse y el partido se abrió. Al equipo blaugrana le cuesta más de la cuenta gestionar sus partidos y el marcador. Poco a poco el cuadro vallisoletano fue dando señales de vida en el área de Ter Stegen, que tuvo que emplearse a fondo ante sendos remates de Enes Ünal y vio cómo una volea de Kike Pérez se marchaba desviada.

problemas

Masip, en cambio, vivió mucho más tranquilo que en el primer tiempo y sólo tuvo que intervenir en un remate de Riqui Puig nada más empezar el segundo tiempo y en una falta directa de Messi. Muy poco bagaje para un equipo que se está jugando el título y no puede permitirse el lujo de dejar escapar ni un solo punto si no quiere regalárselo al Real Madrid antes de tiempo. En muchos momentos el balón pasó a manos del equipo local.

Un agarrón de Javi Sánchez a Piqué dentro del área del Valladolid (76') confirmó que hay un VAR específico para el Real Madrid y otro para el resto de los equipos. Mateu intentó justificarse después de conversar un buen rato con el central catalán al empezar la pausa para la hidratación, pero las imágenes dejaron muy claro que la acción debió ser sancionada con penalti. Inexplicablemente, el VAR también se inhibió de la polémica jugada.

Y en el último suspiro apareció Ter Stegen para evitar el gol del Valladolid al detener sendos remates, uno de Sandro a bocajarro y otro de Waldo. Pero así gana el Barcelona, sufriendo siempre.