Gestos de complicidad entre Dembélé y Xavi

Ousmane Dembélé ha sido uno de los principales nombres de la semana en el Camp Nou. Después de encadenar dos partidos consecutivos saliendo desde el banquillo, el extremo francés ha tenido una semana ‘limpia’ para seguir adquiriendo tono competitivo. Este sábado, contra el Betis, el exjugador del Borussia Dortmund podría disfrutar de su primera titularidad en la temporada 2021/22. Su protagonismo, sin embargo, ha trascendido los terrenos de juego. Su futuro sigue siendo una incógnita y, aunque Xavi Hernández lo considera una pieza importante para su proyecto, no hay ninguna novedad sobre la renovación de su contrato con el Barça, que expira el 30 de junio de 2022.

Para intentar desencallar las negociaciones, el club blaugrana sigue ‘mimando’ a Ousmane. La declaración de intenciones de Xavi en su presentación –y siempre que ha vuelto a ser preguntado por el francés– no pudo ser más contundente. Este viernes, el presidente Joan Laporta se ha manifestado en la misma dirección que el entrenador culé y ha asegurado que “para mí es un pedazo de jugador, mejor que Mbappé”. En la sesión en la Ciutat Esportiva, Dembélé se ha mostrado ajeno a las rumores y a las conversaciones en los despachos. Al saltar al césped para ejercitarse junto a sus compañeros y preparar la visita del Betis al Camp Nou, ha intercambiado cuatro palabras y gestos de complicidad con el técnico.

Después, en los siempre divertidos y amenos ejercicios de activación de Iván Torres, el francés ha sido uno más. Ha aprovechado el ambiente distendido para bromear con algunos compañeros, especialmente Philippe Coutinho y Memphis Depay. Participativo, con ganas de entender las indicaciones del preparador físico, se lo ha pasado bien y ha evidenciado buena sintonía con el grupo. Ha mostrado su versión más competitiva en los últimos instantes de la sesión a los que ha podido acceder la prensa: Xavi ha dividido el grupo en dos conjuntos y ha puesto a prueba su efectividad de cara a portería con remates de cabeza. Las risas de Gerard Piqué y Jordi Alba, como suele ser habitual, han sido las que más se han escuchado en la Ciutat Esportiva.

Mientras el barcelonismo espera inquietamente el desenlace del futuro de Dembélé, tanto el cuerpo técnico como el futbolista son muy conscientes de que el Barça no puede permitirse el lujo de prescindir del francés ni en el compromiso de Liga de este fin de semana ni, evidentemente, en la ‘final’ de la Champions de la semana que viene en Múnich.