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FC BARCELONA

El Barça Atlètic sale del descenso con una remontada providencial

Guille y Unai marcaron los goles de un filial que, con Toni Clavero en el banquillo por la sanción de Albert Sánchez, tuvo la fortuna que le faltó otros días

¡Unai Hernández remonta el partido de cabeza!

@BarcaOneFCB

German Bona

German Bona

El Barça Atlètic sumó su segunda victoria consecutiva a domicilio con sangre, sudor y lágrimas. Los del sancionado Albert Sánchez -Toni Clavero fue quien ejerció en el banquillo como primer entrenador- necesitaron de una remontada y de las dosis de fortuna que tanto les había dado la espalda en otros partidos. Osasuna Promesas creó más ocasiones, pero los goles de Guille y de un notable Unai, además del cambio de dinámica que volvió a originar la entrada de Dani Fernández, permitieron sumar tres puntos que son puro oxígeno.

Osasuna Promesas-Barça Atlètic

Primera RFEF

1
2
Alineaciones
Osasuna Promesas
Pablo Valencia; Arguibide, Garriz, Espejo, Toni Herrero; Jon García (Diego, 74'), Osambela, Unai Santos (Pablo Moreno, 81'); Huarte (Mauro, 74'), Arroyo (Dani Sancho, 69') y Lumbreras (Anai, 69').
Barça Atlètic
Kochen; Olmedo, Mbacke, Sergi Domínguez, Rubén López; Pedro Soma, Aleix Garrido (CUenca, 75'), Unai Hernández (JUan Piera, 89'); Darvich (Dani Rodríguez, 46'), Guille (Pau Prim, 75') y Dacosta (Juan Hernández, 75').

Albert Sánchez, en la grada de Tajonar y en contacto permanente 'vía pinganillo' con su segundo, Toni Clavero, dispuso un once titular con Guille Fernández de falso '9' ante la falta de un 'killer' nato. Esta apuesta le salió bien porque el de la Zona Franca marcó el 1-1 cuando el partido estaba muy cuesta arriba. El 'revulsivo' del anterior partido contra el Celta Fortuna, Dani Rodríguez, volvió a arrancar desde el banquillo al no estar todavía por 90 minutos. Le volvió a dar Sánchez la segunda parte al guipuzcoano, reemplazando a un apagado Noah Darvich.

De menos a más

El filial azulgrana lo pasó realmente mal en la primera media hora de juego. El filial rojillo fue metiendo a los de Albert Sánchez en su área y no hubo capacidad para crear juego. Las ocasiones locales se fueron sucediendo hasta llegar un gol que cumplió con la lógica. El propio autor del 1-0, Roberto Arroyo, había dado un aviso minutos antes en un chut que salió fuer por poco. Más preciso fue en el minuto 24 con un derechazo desde la frontal del área tras un mal despeje defensivo. Nada pudo hacer Kochen.

Parecía que se le aparecían todos los fantasmas al filial azulgrana, pero Unai se echó al equipo a sus espaldas y primero, en el 38', sacó una falta que logró rematar muy solo Mbacke pero sin dirección, y después, en el 41', inició la acción del empate. Su pase le llegó a Dacosta, que disparó cruzado y Guille, atento en la posición del '9', aprovechó el rechace de Pablo Valencia para enviar el balón al fondo de la red.

Se esperaba continuidad en la mejoría barcelonista en el arranque de la segunda mitad, y más con la entrada de Dani Rodríguez. El de Astigarraga se ubicó en banda derecha y pronto dio muestras de su peligrosidad. ¡Qué necesaria fue, una vez más, su entrada!

Y es que volvió a aparecer con el Barça Atlètic de nuevo contra las cuerdas, primero en un rechace de Kochen con la espalda que se fue al palo, y después, con un paradón del de Miami a cabezazo de Xabi Huarte.

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Esport3

Así que nada mejor que balones a Dani Rodríguez. Y le llegó uno en el minuto 63 tras la 'delicatessen' de tacón del capitán Aleix Garrido, centro medido del vasco y cabezazo de Unai para, pese a no ser su fuerte, sorprender de muy cerca a Pablo Valencia, que no pudo sacarse el balón de encima. Séptimo gol esta temporada del de Malgrat, de nuevo haciendo méritos para que Flick le tenga más en cuenta.

Sin ser ni de largo uno de sus partidos más brillantes, el Barça Atlètic había conseguido darle la vuelta al partido y no lo podía desaprovechar. Albert Sánchez hizo entrar a Cuenca, Pau Prim y Juan Hernández en un tramo final en el que tocó sufrir. Dani Sancho falló increíblemente con todo a favor para marcar. También cabeceó Echegoyen sin ninguna oposición, pero se fue alto. Lo importante, al fin y al cabo, fue conquistar una victoria que fue puro oxígeno.