FC Barcelona

La Fundación, la gran obra de Johan Cruyff

El gran sueño de Johan Cruyff es devolverle a la sociedad todo lo que ella le ha dado y qué mejor forma de hacerlo que ayudando a niños con discapacidad a hacer deporte

Las Cruyff Courts que hay en el mundo

Las Cruyff Courts que hay en el mundo / sport

Toni Frieros

Johan Cruyff está considerado uno de los mejores jugadores de fútbol de todos los tiempos. El hombre que, primero como jugador, y posteriormente como entrenador, contribuyó a cambiar la historia de este deporte. Su peculiar estilo, inconfundible, y sus numerosos logros, hablan por sí mismo. Johan Cruyff, sin embargo, es mucho más que un mito viviente, es un ser humano comprometido con los más débiles y necesitados: los niños discapacitados.

Las prioridades de Cruyff y su visión de la vida cambiaron de forma radical cuando a finales de los años setenta conoció en Los Ángeles (jugó esa temporada para los Diplomats de la Liga Americana) a Eunice Kennedy Shriver, una de las cinco hermanas de John Fitzgerald Kennedy, presidente de los Estados Unidos. Eunice, cuya hermana Rosemary sufría una discapacidad intelectual, dedicó su vida a acercar el mundo del deporte, a través de su fundación, a todos aquellos niños y adultos que la padecían, ya fuera física o psíquica. Ella fue quien luchó y concienció a la sociedad americana para apoyar y crear los Special Olympics Summer Games, que tuvieron lugar por primera vez en el Soldier Field de Chicago en julio de 1968.

Cruyff quedó impactado con aquellos Juegos, del contacto con los deportistas discapacitados y en su interior siempre estuvo latente la idea de devolverle a la sociedad todo lo que ella le había dado. Fue así, ya siendo entrenador del FC Barcelona en plena etapa del ‘Dream Team’, cuando en 1995 creo la ‘Johan Cruyff Foundation’ en Barcelona y un año más tarde en Ámsterdam.

Primeras acciones Los primeros proyectos de la Fundación Cruyff consistieron en visitar escuelas de educación especial y crear alianzas con entidades deportivas para que niños con discapacidades pudieran practicar un deporte como una actividad extraescolar. Fue así como pudieron hacer vela, escalada, tenis, hípica, esquí, pádel, natación, etcétera.

En 2004 la Fundación dio uno de sus pasos más importantes con la creación del proyecto ‘Cruyff Courts’. Acudieron a los barrios más degradados de algunas ciudades, donde más riesgo de exclusión social existe y hay menos recursos, y construyeron en suelo público, con la ayuda de los ayuntamientos locales, campos de fútbol artificial de 42x28 metros.

El éxito de este programa ha sido tan extraordinario que en 2014 se disputó en Ámsterdam el primer Campeonato del Mundo de los ‘Cruyff Courts’, torneo donde cada equipo juega con seis jugadores. Cada población hizo su propio campeonato con niños de 11 y 12 años de las escuelas públicas de su zona.  Después se hizo por países. En la edición de 2014 participaron 1.500 niños en Catalunya y 10.000 en el resto del mundo. Dinamarca se proclamó vencedor de la prueba masculina y una escuela de El Vendrell que representó a Catalunya se hizo con el torneo femenino.

El campeonato se celebra bajo las 14 reglas de la Fundación Cruyff. Todos los participantes firman un documento obligándose a cumplirlas. El próximo Mundial se celebrará en 2018.

Estrechamente ligado al proyecto ‘Cruyff Courts’ se puso en marcha en 2011 el ‘Community Program’, un plan, de ocho semanas de duración, en las que chicos de 14 a 21 años aprenden a desarrollar y organizar eventos deportivos en sus respectivos vecindarios. Con la ayuda de entrenadores de la Fundación, desarrollan sus capacidades organizativas, creativas y aptitudes y se involucran en sus barrios. Muchos de estos chicos son los que colaboran en el desarrollo de los torneos que se disputan en las ‘Cruyff Courts’. 

Xavi Hernández, con ‘La Caixa’, inauguró una en Terrassa y está previsto que Carles Puyol inaugure una en La Pobla y Sergio Busquets otra en Badía.

<strong>El otro gran pilar de la Fundación es el proyecto ‘Patio 14’,</strong> una idea sencilla, pero eficaz, que ha tenido mucho éxito y visibilidad, como el ‘Pati 14’ que inauguraron Cruyff y el FC Barcelona en la Zona Franca de Barcelona.

La Fundación va a escuelas públicas necesitadas y a través de pinturas en el suelo o en las paredes se mejora el atractivo del patio. Cada escuela puede elegir sus propias pinturas. 

Desde que la Fundación Cruyff se pusiera en marcha ya ha destinado a sus proyectos de integración social más de 39 millones de euros. Son muchos los esponsors y diferentes fundaciones que colaboran. Hace dos años, por ejemplo, la FIFA la premió con un millón de euros para la renovación de sus campos de fútbol.