Y el fondo salió del armario

Las notas de los jugadores del Barça ante el Espanyol

Las notas de los jugadores del Barça ante el Espanyol / SPORT.es

Toni Juanmartí

Toni Juanmartí

Por fin se ha hecho realidad. La llegada de Luis Enrique al banquillo del Barça supuso un cambio de tendencia a nivel de gestión. Guardiola nunca escondió que prefería trabajar con plantillas cortas, mientras que el asturiano optó por un plantel de más extenso para poder aplicar sus agresivas rotaciones. Sin embargo, el tan elogiado fondo de armario no respondió cuando se le necesitó en las grandes ocasiones. Ahora, en cambio, Ernesto Valverde sí se está beneficiando de un conjunto repleto de soluciones.

Las incorporaciones de Digne, André Gomes, Alcácer, Umtiti, Cillessen y Denis Suárez en verano de 2016 agrandaban la clase media del vestuario culé. Luis Enrique pidió caras nuevas y jóvenes para fomentar la competencia interna. El gijonés pretendía evitar así relajaciones, aunque a la hora de la verdad su hoja de ruta no surtió efecto. Cada vez que rotaba en masa o había lesiones de hombres importantes el equipo bajaba y mucho sus prestaciones.

A Valverde sí le funcionan las rotaciones. El fondo de armario es una solución real y los casos de Semedo, Lenglet, Arturo Vidal o Malcom así lo demuestran. Cada uno con su determinada cuota de protagonismo está aportando buenos minutos cuando se les ha necesitado. Incluso podría entrar en ese grupo Dembélé, aunque el francés se ha ganado a base de goles un rango superior. De hecho, ahora mismo parece complicado saber si el once de gala incluye a Coutinho o al ex del Dortmund. Lo más positivo del debate es que tanto el brasileño como el francés han desencallado saliendo desde el banquillo, y eso es lo que gana Ligas.

Lenglet abandera la 'revolución' de la clase media, y a él se le ha unido Arturo Vidal. El central francés se ha asentado en el once ante los problemas de rodilla de Umtiti, respondiendo mejor de lo esperado en su primer año en Can Barça. Tanto es así que la lesión de 'Big Sam' ha pasado de drama a contratiempo. Sus buenas actuaciones en Wembley o en el Clásico confirman que el equipo cuenta con un tercer central de garantías.

Arturo Vidal ha ido de menos a más. Arrancó el curso siendo más protagonista por sus emoticonos discordantes pero en las últimas semanas ha puesto la quinta marcha. El chileno empieza a ser el tráiler que muchos esperaban, pues tanto en el Wanda como en el derbi realizó un monumental despliegue físico.

También Semedo y Malcom están dando la cara. La lesión de Sergi Roberto ha multiplicado los minutos del luso, al que el barcelonismo parece haber aceptado con sus pros y sus contras. El ex del Benfica es fiable en el carril derecho, donde destaca por su velocidad y también por sus dos o tres pérdidas peligrosísimas por partido.

Por su parte, Malcom ha visto frenada su irrupción por culpa de una lesión. Su tanto en Milán le valió para ser titular ante el Betis pero un esguince ante la Cultural Leonesa ha enfriado la entrada en escena del brasileño, más querido, de momento, por el vestuario que por Ernesto Valverde.