Eric: ¿Ser el Nacho del Barça o salir a buscar minutos?

Con 22 años, lo típico que se suele aconsejar a un futbolista es que juegue. Que busque un lugar donde tenga protagonismo y trascendencia en forma de minutos. Eric Garcia, es una evidencia, ahora mismo no los tiene en el Barça. La retirada de Gerard Piqué abría un nuevo abanico para los centrales que estaban participando menos.

Pero lo cierto es que Xavi ha apostado como primera alternativa a la consolidada pareja Christensen-Araujo por Marcos Alonso. La reconversión del madrileño de lateral a central y el hecho de que sea el único zurdo en esa demarcación han provocado que las oportunidades escaseen para el ex del Manchester City.

Es tan sencillo como echar un vistazo a sus números. Ha disputado 457 minutos de los 1530 que se han jugado este 2023. Es menos de un 30%. En lo que llevamos de año no ha llegado a enlazar dos titularidades seguidas. Y ese, repetimos, para un jugador de su edad, no es el escenario ideal. Además, lo cierto es que su relevancia dentro del engranaje de Xavi ha ido cayendo.

Empezó bien. Hizo un buen tramo inicial de curso, recibió elogios por sus actuaciones. Fue titular en los cuatro primeros partidos oficiales del Barça. También lo fue en el doble enfrentamiento ante el Inter y en la derrota en el clásico. Probablemente esa racha fue la que provocó que su figura empezara a desaparecer de los onces de Xavi. Antes del Mundial, no disputó ni un minuto en los dos últimos partidos oficiales del Barça. Y en la Copa del Mundo no llegó a participar.

OPCIONES DE FUTURO

Desde entonces, la incidencia de Eric ha sido más bien escasa. Y no se antoja, salvo que haya lesiones de los titulares, que el panorama vaya a cambiar en lo que queda de curso. La cuestión es si el jugador aceptará ese rol de cara al futuro o se sentará con el staff para valorar si no es mejor buscar una salida.

Cabe la posibilidad de que pueda convertirse en una especie de Nacho en el Madrid, de hombre de club. El defensa madrileño empezó participando poco y encadenando renovaciones. En silencio, picando piedra sin rechistar. Y hoy en día, maduro, es de mucha utilidad para Ancelotti. Aunque, como decíamos al principio, lo que necesita para crecer como futbolista es jugar, enlazar partidos. Veremos cómo evoluciona el 'caso'...