Eric Garcia, pendiente de Messi

Las negociaciones entre Barça y Manchester City por Eric Garcia han incorporado desde el burofax de Messi un nuevo condicionante. Y no se trata de un condicionante cualquiera, sino de un factor de dimensiones mayúsculas: el futuro del mejor jugador del mundo. La evolución del 'caso Messi' puede alterar la postura de ambos clubes en las conversaciones por el regreso a 'casa' del central catalán.

SPORT ya adelantó en su día que el City había tasado a Eric en 23 millones de euros, un precio que el Barça consideraba -y sigue considerando excesivo-. En la presente semana, el conjunto azulgrana esperaba avanzar en la negociación. El primer contacto sirvió al Barça para comprobar que nada había cambiado: la entidad británica seguía remitiéndose a dicha cantidad. Por su parte, el club azulgrana considera que, restándole al jugador un año de contrato, dicha cifra es desproporcionada. Y antes de que ni unos ni otros pudieran mover ficha, cayó la bomba de Messi, un incendio de dimensiones colosales.

Si ya de por sí dicha situación paraliza a todo un club, más aún cuando el probable destino de Leo es el club con quien el Barça está negociando el traspaso de Eric Garcia. La partida cambia. Y se alarga.

El nuevo escenario plantea al Barça una contradicción, ya que el verse obligado a negociar con el City por Messi acercaría a Eric Garica pero significaría estar perdiendo al mejor jugador de tu historia. ¿Significa esto que el fichaje de Eric depende de la salida o no de Messi? En absoluto, pero nadie duda de que la posibilidad de hacerse con Leo podría rebajar la tasación del Manchester City del central catalán.

Si la evolución del 'caso Messi' no deriva en negociaciones entre Barça y City por el argentino, la intención culé seguirá siendo la de traer a Eric de vuelta este mismo verano. La partida volvería entonces al punto en el que estaba justo antes del burofax de Messi: los ingleses valorando a Eric por encima de los 20 millones y el Barça negándose a ofrecer dicha cantidad. A los azulgranas no les quedaría otra que picar piedra intentando que el City rebajara sus exigencias. En el peor de los casos, el Barça centraría sus esfuerzos en mantener el 'sí, quiero' del jugador para poder incorporarlo en enero o gratis el próximo verano.