El Barça se hunde en Lisboa

Concentración, intensidad y verticalidad: así fue el golazo de Gnabry

Concentración, intensidad y verticalidad: así fue el golazo de Gnabry / MEDIAPRO

David Rubio

David Rubio

<strong>El Barça se sigue mostrando tan frágil como un cirstal de Bohemia este viernes</strong> en los cuartos de final de la Champions en Lisboa y vuelve a estar claramente por debajo en el marcador en Lisboa.

Tras el tanto inicial de Müller y el autogol de Alabael cuadro azulgrana ha visto cómo el Bayern le pasaba por encima en apenas una decena de minutos que han bastado para sentenciar a los de Quique Setién.

Poco debe haber ensayado el técnico azulgrana lo que todos esperaban que expondría el cuadro alemán, que ha anotado tres goles prácticamente seguidos de todas las facturas.

El caso es que la mayor intensidad y la mayor capacidad física de los bávaros está destrozando a un conjunto azulgrana que llega tarde a cada cruce y es superado en cada acción igualada.

Con 1-1, Sergi Roberto ha perdido un balón en campo propio ante Gnabry, quien se ha internado y ha cedido hacia Perisic para que el croata fusilase a Ter Stegen. Rozó la pelota Lenglet, pero no pudo evitar el gol.

En plena zozobra, un Gnabry en estado de gloria ha superado en la pelea por un balón largo a Lenglet y ha anotado el 1-3 en el 28', solo seis minutos después del 1-2.

Y sin tiempo para reaccionar, justo después de superar la media hora de juego el balón ha caído a los pies de Thomas Müller y el jugador al que descubrió Louis Van Gaal ha firmado el 1-4.

No es que el Barça tenga ya casi imposible el pase a las semifinales, es que o cambia la dinámica del partido o el equipo podría encajar una de las derrotas más humillantes de la historia en Europa.

Eso sí, no sería justo obviar el excelente momento que atraviesa el Bayern, para muchos el gran favorito en la pelea por la Champions más atípica de la historia.