El día que Rosell volvió a sentirse querido

Sandro Rosell, en libertad provisional

 El ex presidente culé, en libertad provisional tras celebrarse su juicio / Perform

Joan Vehils

El expresidente del Barça, Sandro Rosell, asistió ayer al Open Banc de Sabadell. Estaba invitado a comer con el presidente Josep Maria  Bartomeu y con algunos ejecutivos del Grupo Godó pero sin quererlo se convirtió en la estrella de la jornada del torneo Banc de Sabadell.

Por eso, Sandro Rosell, no pudo probar bocado. Fue sentarse en la mesa y empezar a recibir muestras de apoyo de casi todos los presentes en el restaurante del Village. 

Imposible contar los abrazos recibidos

Desde el exdirectivo, Javier Faus, pasando por los exjugadores, Pichi Alonso y Víctor Muñoz, o su abogado Pau Molins, se acercaron a su mesa. Amigos, conocidos y saludados quisieron mostrar su apoyo al expresidente. 

Seguro que Rosell nunca olvidará este Sant Jordi. Tras dos años muy duros, ayer, de nuevo, se sintió querido. Era su primera aparición en un acto público, no benéfico, y además junto a su amigo y presidente del Barça, Josep Maria Bartomeu y resultó un homenaje improvisado.

Por cierto, que Molins <strong>nos explicó que esta misma semana puede haber sentencia</strong>. Hay un optimismo moderado sobre la sentencia final pero preocupa que entre los jueces intenten proteger a Carmen Lamela y redacten una sentencia que no la deje más en evidencia. Ya saben, Lamela es la  juez que mantuvo incomprensiblemente a Rosell en prisión preventiva durante casi dos años. Sin duda, una injusticia.

Quizá por eso, ayer, Sandro recibió tantas muestras de apoyo. No recuerda uno tantos abrazos sentidos a Rosell desde que ganó las elecciones del Barça en el 2010.

Tras el almuerzo, en la magnífica terraza del stand del Banc de Sabadell no podía dar un paso sin recibir más muestras de cariño. Allí, le vimos conversar un buen rato con el presidente, Josep Oliu, saludar al empresario, Marc Puig y bromear con al expresidente del RCE Espanyol, Dani Sánchez Llibre. Eso sí, no se vio con Laporta aunque también estaba en esta misma zona. En fin, que nada compensará el castigo sufrido pero ayer, seguro que cogió la cama con la sensación de sentirse querido.