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FC BARCELONA

Menos desgaste para Raphinha

Brasil jugará sus amistosos de noviembre en Londres y París, por lo que el extremo gaucho se evitará la paliza de cruzar medio planeta para jugar dos partidos de nulo interés

Raphinha, un pilar para el Barça y para la selección brasileña

Raphinha, un pilar para el Barça y para la selección brasileña / AP

Joaquim Piera

Joaquim Piera

Raphinha se ha quedado en Barcelona durante esta fecha FIFA. Se ha librado de la minigira asiática que la Confederação Brasileira de Futebol (CBF) ha organizado en este parón para los clubes.

Su conocida ausencia, sin embargo, tiene un trasfondo negativo: una lesión muscular que lo ha dejado KO durante tres semanas, según ha determinado el departamento médico blaugrana. El polivalente extremo sufrió una rotura en el tercio medio del bíceps femoral del muslo derecho. Se lesionó en la victoria azulgrana en Oviedo (1-3), cuando tuvo que ser sustituido por Lewandowski en el minuto 65.

En noviembre habrá otra fecha FIFA, para desesperación de los clubes tanto en Europa como en Sudamérica, justo cuando se entra en el tramo decisivo de la temporada y se deciden los títulos. La CBF —que, como todas las federaciones, solo mira por sus propios intereses— ha puesto algo de cordura y prepara dos amistosos contra selecciones africanas en territorio europeo.

A falta de confirmación oficial, los rivales podrían ser Senegal y Túnez, si ambas selecciones no disputan la repesca del Mundial 2026, cuya resolución se conocerá en octubre. El primero de los encuentros del conjunto dirigido por Ancelotti se jugará en el Emirates Stadium, en Londres, y el segundo en el Stade de France, en París. La Seleção, que contará con todas sus estrellas, espera dos llenos absolutos.

Dentro del incordio que suponen las convocatorias de los internacionales en la planificación deportiva de Hansi Flick, no es una mala noticia que Raphinha permanezca en el Viejo Continente, a tenor de lo sucedido en el presente curso.

Se evitará así el desgaste de cruzar medio mundo, como han hecho ahora sus compatriotas para actuar en Seúl y Tokio, o de viajar al otro lado del Atlántico, como hizo Rapha en septiembre. Entonces, para desesperación del cuerpo técnico culé, fue exprimido por Carlo Ancelotti, que no convocó a ningún futbolista merengue. Al técnico italiano poco le importó tener la clasificación garantizada para el Mundial 2026, e hizo jugar al extremo blaugrana contra Chile, en Maracaná, y en la altitud de 4.100 metros en Bolivia.

En aquella convocatoria también estuvo Marquinhos, otra de las vacas sagradas de la Canarinha, que, al igual que Raphinha, acabó sufriendo un percance muscular y ahora sigue recuperándose en París.