Descubriendo a Ferran Torres

Sus actuaciones han sido discretas, más allá de un gol y una asistencia, pero aún está llegando

Guardiola fichó a un extremo, pero se dio cuenta de que tenía virtudes para convertirlo en falso 9

¡El Barça necesita su puntería! Revive el golazo de Ferran Torres en su estreno como culé

El golazo de Ferran Torres en su estreno como culé / RFEF

Xavi Torres

Xavi Torres

Media parte ante el Real Madrid, en la Supercopa, y los partidos enteros contra el Athletic, en Copa, y ante el Alavés, en la Liga, han servido para certificar que Ferran Torres todavía necesita tiempo para recuperar el ritmo de competición y, también, para su adaptación al Barça.

El valenciano marcó un gran gol en San Mamés y facilitó la diana de Frenkie de Jong en Vitoria pero sus actuaciones, más allá de los números, han sido discretas. Normal: todavía está llegando... a un equipo plagado de dudas y sin delanteros titulares -Dembélé, por su situación y Ansu, por su lesión-; con suplentes que ya no están -Kun, Coutinho y Demir-; con otros, con limitaciones -Memphis, Luuk de Jong y Braithwaite-, y con jóvenes abriéndose paso -Abde, Jutglá e, incluso, Ilias-.

En medio de tanta incertidumbre Ferran Torres, que solo tiene 21 años, debe adaptarse también a un hábitat diferente a la de su ex Manchester City, quizás ahora mismo, el equipo mejor organizado del mundo. Por esta razón y por la capacidad de Guardiola como técnico, haría bien el Barcelona en atender al trabajo que Pep ha hecho con el futbolista.

UNA VIDA COMO EXTREMO

Ferran debutó con el primer equipo del Valencia (2017-18) con 17 años en un partido de Copa contra el Zaragoza. Su técnico, Marcelino García, valoró mucho su potencia y atrevimiento. Internacional en categorías inferiores jugando como extremo derecho, cerró su primer curso con 21 ratos (apenas el 9% de los minutos) y, atención al dato, 0 goles.

Durante la siguiente, Marcelino lo alineó en 37 encuentros (33’7% de los minutos) proclamándose campeón de Copa -ante el Barça- y anotando, atención de nuevo, solo tres goles en todas las competiciones.

En su última sesión en Valencia Ferran superó la inestabilidad de la institución para convertirse en un pilar del equipo jugando 44 partidos, 35 como titular, el 68’9% de los minutos, con apenas 19 años. Sigan atentos: solo marco 6 goles.

En verano de 2020, 25 milllones de euros se lo llevaron a Manchester para jugar en el todopoderoso City de Guardiola. Allí, Ferran redujo a la mitad su protagonismo en el equipo (solo el 39% de los minutos). Pero tal vez lo más importante para él fue el máster futbolístico que realizó a las órdenes de Guardiola y que acabó en un cambio de demarcación.

DELANTERO CENTRO EN POTENCIA

Pep fichó a un extremo para descargar de minutos a Sterling, Mahrez, Foden y Gabriel Jesús y para utilizar a Bernardo Silva como interior pero en seguida se dio cuenta de que sus características no le daban para superar rivales en ataque estático desde la posición de parado y que no disponía de la velocidad necesaria para marcharse por piernas de sus marcadores. Sin embargo detectó una excelente movilidad -sobre todo para buscar la profundidad-, un gran chut y una tranquilidad y definición destacables de cara a gol. Guardiola vio en Ferran buenas virtudes para convertirlo en el falso 9 de su sistema. A partir de ahí, mucho entreno, un día tras otro, la universidad en el césped. Ferran fue incorporando mecanismos, aprendiendo a entender el fútbol, generando y aprovechando espacios. Y mejorando. ¿Recuerdan los goles de Ferran en sus tres primeras temporadas? Eso es, 0, 3 y 6. Pues bien, en la cuarta, su primera en Manchester y jugando la mitad que en su última sesión en Valencia, ¡13 goles!  

Las estadísticas goleadoras de Ferran Torres mejoraron en el Manchester City

Las estadísticas goleadoras de Ferran Torres mejoraron en el Manchester City / EFE

Su aprendizaje se interrumpió porque el Barcelona de Joan Laporta tiene como director de Fútbol a Mateu Alemany, que antes lo había sido en el Valencia de Marcelino, el entrenador que le dio la primera oportunidad a Ferran. Y conocía al delantero y a su entorno y, también, la ilusión que le hacía jugar en el Barcelona sabiendo que, además, iba a ser titular indiscutible desde el primer día. Y así ha sido. A pesar de estar tres meses sin jugar por culpa de la fractura en el pie que se hizo tras lesionarse con la selección española en el partido de semifinales de la Copa de las Naciones -quizás su mejor partido como internacional jugando, por cierto, de delantero centro y anotando 2 goles-. El Barça pagó 55 millones de euros más 10 en variables en una firme apuesta para la resurrección deportiva de la entidad. Así pues, Ferran y diez más.

CON XAVI, DE NUEVO A LA BANDA

Presentado el 3 de enero como azulgrana, su debut llegó nueve días después ante el Real Madrid, en la Supercopa de España. Jugó de extremo, como también ante el Athletic y el Alavés. Nos quedamos en este partido para analizar su juego. ¿Lo ve ahí Xavi Hernández o lo necesita en esa demarcación ante la ausencia de jugadores de banda?

En Vitoria Ferran estuvo mal, como el resto del equipo. Jugó en la derecha en un 4-3-3 hasta el 23’; en la izquierda, en ese mismo dibujo, del 23’ al 71; y hasta el final, otra vez en la derecha, en un 3-4-3. De entrada abierto, disciplinado, pero con libertad para recibir y buscar la diagonal hacia el centro. De hecho, en un movimiento de estas características llegó la primera ocasión azulgrana, con centro suyo y remate de Luuk de Jong, fuera (13’). 20 minutos después -ya jugando en la izquierda- realizó su único chut, con su pie bueno, el derecho, pero muy desviado.

Sin embargo nos detenemos en un detalle: su capacidad para ofrecerse al espacio y en profundidad. En la primera parte, por ejemplo, en los minutos 4, 8, 21, 28 y 29 lanzó carreras atacando la espalda de la defensa del Alavés sin que en ninguna de ellas recibiera el pase de sus compañeros Piqué, Frenkie, Sergio, Alba y Alba, respectivamente. Es evidente que quien tiene el balón, decide, pero en este Barça tan faltado de profundidad las aportaciones de cualquiera de sus delanteros en este sentido deben ser consideradas oro. Y, si se me permite, deberían ser utilizadas sí o sí. En este sentido es bueno recordar que el objetivo de abrir el campo con extremos no es hacerles llegar el balón a ellos sino provocar espacios interiores para buscar la portería rival que, como todo el mundo sabe, está en el centro.

En la segunda parte, ya con Ferran de nuevo como extremo diestro y con el equipo buscando el gol desesperadamente en el 3-4-3, dos nuevos desmarques en profundidad (80’ y 86’) no fructificaron (Frenkie no lo vio y Sergio no tuvo precisión en el último toque), pero sí el tercero: pase de Alba a la espalda de Javi López, asistencia de Ferran y gol de Frenkie de Jong. 0-1, por fin.

PISAR EL ÁREA

En la banda, Ferran trató dos veces de regatear a su marcador desde la posición de parado, pero no lo consiguió: si va en carrera, perfecto, porque es muy potente; si es en ataque estático, sufre. Sus obligaciones tácticas lo llevaron a jugar lejos del área y su partido fue muy discreto. En las condiciones actuales quizás sería una buena idea usar la fórmula Guardiola, es decir, con Ferran como falso 9, en ocasiones acercándose a los interiores para generar superioridades y espacios a su espalda y en otras, rompiendo en profundidad, movimiento necesario como el aire en el Barça actual. Este es el fútbol que Xavi tiene en su cabeza... y por eso, a pesar de las dificultades para cuadrar las alineaciones con jugadores del primer equipo y los que tienen ficha del filial, a pesar de las bajas y demás circunstancias, sorprende ver determinada confianza en jugadores que no interpretan el juego bajo la misma mirada y que no representan ni el presente ni el futuro de la entidad.

Veremos qué pasa con Dembélé y, de rebote, con Morata, si es que éste es el jugador que desea el entrenador. Veremos qué quiere Xavi para su Barça tan faltado de goles y donde se imagina a Ferran, por dentro o por fuera. Y también veremos si se produce su crecimiento individual y también el del equipo.