El 'No' de Dembélé obliga a Barça y PSG a cambiar de planes

La postura de Dembélé es un problema para el Barcelona porque le obliga a un nuevo esfuerzo tanto en el precio del traspaso de Neymar como en la masa salarial. La marcha del francés hubiera supuesto que su salario fuera asumido por el PSG con lo que la masa salarial de la plantilla azulgrana habría hecho un hueco para encajar el salario de Neymar.

El Barça tiene ahora la misión de encontrar una solución. Y hay tres opciones encima de la mesa: Analizar su económicamente el Barça puede subir la oferta, negociar con Neymar una rebaja de su salario (percibirá unos 25 millones de euros anuales) y hacer un último intento para convencer a Dembélé que se vaya un año a un club en el que sí va a jugar y que vuelva a final de la presente temporada más rodado. Este último apretón llegará desde las más altas instancias del club.

El club azulgrana entiende que hoy será una jornada de reflexión para diseñar la nueva oferta y, si está acabada, presentarla al PSG para tener pronto una respuesta, que podría llegar durante el fin de semana. El tiempo apremia a las tres partes (Neymar, PSG y Barça) por lo que si finalmente concluye esta operación, debería producirse durante el fin de semana.

El club francés también recibido un fuerte golpe con la negativa de Dembélé porque el extremo les permitía cubrir el hueco tanto deportivo como mediático que dejaba Neymar. Tener en un mismo once titular a dos de los tres delanteros de la selección campeona del mundo era suficiente tarjeta de presentación para mitigar la salida de Neymar. Ahora, el PSG se encuentra con la tesitura compleja: Por una parte, completar la salida de Neymar, acabar de llegar a un acuerdo con Rakitic y con Todibo y luego cubrir el hueco que deja Ney con una estrella que pueda encontrar en el mercado. 

A Dembélé se le intentó explicar las bondades de fichar por el PSG (Más minutos, mejor sueldo, un papel de estrella) pero se negó en redondo. 

Puede jugar muy poco

Ousmane entiende que esta será su temporada en el Barcelona, un sueño al que no quiere renunciar pese a la competencia de Suárez, Messi, Griezmann e incluso Neymar. Su papel quedaría relegado al quinto delantero, con muy poca participación, pero se niega a tirar la toalla.

El PSG, mientras tanto, ya estaba buscando ayer mismo soluciones al problema que tiene y Leonardo viajó de urgencia a Italia para entrevistarse con los gestores de la Juventus para intentar fijar un precio para Dybala, la pieza que podría encajar en su plantilla para la próxima temporada en el caso de que Dembélé siga sin dar su brazo a torcer. Leonardo, actual secretario técnico del equipo, sabe que Neymar no seguirá en el club francés y, frustrada la opción de Dembélé, considera que el argentino puede encajar.