Dembélé y el gol que no se celebraba en el Camp Nou en Liga desde 2013

Se han disputado 146 encuentros ligueros en el estadio azulgrana antes de volver a gritar un tanto ganador en el último minuto

Los de Ronald Koeman se están empezando a aficionar a las gestas

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Sergi Graell

Sergi Graell

Un gol que puede valer un campeonato y que levantó a todo aficionado culé de su sofá, y que, sin duda, habría propiciado una estremecedora celebración en el Camp Nou, quedó huérfana del clamor del público, pero esto no le resta importancia al importantísimo tanto de Dembélé. En un Barça abonado a las agonías de los últimos minutos, los de Ronald Koeman se están empezando a aficionar a las gestas. Desde llegar a la final de Copa poniendo a prueba marcapasos, pasando por dar un golpe en LaLiga en el último suspiro contra el Valladolid, a la posibilidad de remontar un campeonato liguero que parecía totalmente fuera de alcance.

Corría el minuto 89. Nerviosismo y sensación de haber perdido la gran oportunidad de remontar esta liga, pero a diferencia de años atrás, los de Ronald Koeman van sobrados en coraje y ganas de luchar hasta el último instante. Araujo lo peleó y Dembélé la empalmó para enviarla al fondo de las mallas, algo que no pasaba en el estadio azulgrana en liga desde hacía 146 encuentros. La última vez fue el 14 de setiembre de 2013 contra el Sevilla.

Para hacerse una idea del largo tiempo transcurrido, en aquel mismo partido, Ivan Rakitic anotó y asistió para el equipo hispalense, pero Alexis Sánchez en el 94, dejó la victoria en Barcelona. En ese encuentro, 75.000 personas pudieron gritar al unísono el tanto del chileno, ahora es diferente, pero tiene su gracia también poder escuchar la euforia de los propios futbolistas, más conscientes que conscientes de lo que suponía este gol.

El 'mosquito' le chupó la sangre al Atlético

El francés salió al rescate de un apagado Barça, que pagó el parón de selecciones y también, un gran planteamiento de Sergio González. Regaló al equipo tres puntos que valen oro y, sobre todo, sirven para dar un golpe sobre la mesa. El Atlético ya no depende de sí mismo, y el Barça, ahora mismo, es ese equipo que tiene la confianza necesaria para sacar adelante partidos encallados.

Koeman ha preparado al equipo físico y mentalmente. La remontada de Granada y el gol en el último instante de Gerard Piqué en la Copa, sumados a este último, son una prueba irrefutable del hambre que tiene este grupo. Todos lo pelean, todos lo sienten y todos van a una para afrontar el tramo final de curso.