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El Barça echa cuentas pensando en Luis Díaz

Deco planifica con el colombiano como gran objetivo del próximo verano

Liverpool - Bayern Leverkusen | El 'hat-trick' de Luis Díaz

Champions

Toni Juanmartí

Toni Juanmartí

No será fácil, pero el Barça lo intentará con Luis Díaz. El extremo del Liverpool gana cuota en la cabeza de Deco, que asume la extrema dificultad de intentar firmar a Isak. El club azulgrana aún no sabe qué margen de 'fair play' tendrá en verano, pero el director deportivo traza la hoja de ruta necesaria para estar en disposición de fichar al colombiano.

A sus 28 años, Díaz cumple a la perfección el perfil de jugador que busca el Barça para reforzar el ataque la próxima temporada. Está en plena madurez, tiene desequilibrio en estático y es versátil. Como ya explicó SPORT, en un mundo 'ideal' y sin limitaciones económicas, Isak sería el gran deseado, pero tiene contrato hasta 2028 y el Newcastle ya ha mandado varios avisos de que quien quiera al sueco deberá superar los 120 millones de euros. Más aún si las urracas se acaban metiendo en Champions.

Algo más favorable es el contexto de Luis Díaz. De entrada, al colombiano le seduce enormemente la posibilidad de fichar por el Barça. El cafetero vive su cuarta temporada en Inglaterra y estaría encantado de ser culé. Su padre ya reveló que Luis tiene al club azulgrana como "un sueño" desde pequeño y el propio jugador admitió cuando militaba en el Junior colombiano que en un futuro le gustaría vestir la elástica del Barça.

Díaz ya conoce los deseos del Barça

Deco ya ha mantenido varios contactos informales con el entorno del jugador, que conoce sobradamente los deseos del director deportivo. No obstante, el Barça no puede pasar hoy de buenas intenciones porque el 'fair play' limita a la entidad, que debería acometer al menos una venta considerable en verano para aspirar realmente al atacante.

El hecho de que Díaz tenga contrato 'solo' hasta 2027 también es una ventaja respecto a Isak. El jugador está prácticamente amortizado y, de no salir el próximo verano, en 2026 el Liverpool ya tendría un poder muy limitado, pues sería el último para poder hacer caja y eso suele significar cifras sensiblemente más bajas. Después, claro, si el jugador no palpa que el Barça tenga músculo real para ir a por él, la renovación siempre es una opción.

Deco traza la hoja de ruta

Aunque todavía es pronto, en el club ya empiezan a echar cuentas a la hora de analizar cómo generar todo el 'fair play' que exigiría una operación que no bajaría de los 70-75 millones de euros. Eso supondría un espacio salarial de al menos 30 millones de cara al curso que viene, pues es la cantidad procedente de la amortización más el salario del jugador.

Para lograrlo, en Can Barça saben que son varias las opciones para hacer caja. Al margen de porcentajes o ventas de jugadores en propiedad que no son parte de la plantilla azulgrana -los Mingueza, Álex Valle, etc-, el club cree que es en la medular donde tendría sentido estudiar alguna oferta interesante si esta llegara. El número de efectivos en el centro del campo es más que suficiente pero solo Pedri se considera intransferible a cualquier precio. En la zaga, a los casos de Eric, Christensen y Araujo también se les debe colocar un asterisco. En el caso del charrúa, solo si él pidiera un cambio de aires.