Coutinho da la razón a Koeman

Philippe Coutinho marcó ayer el primer gol en su segunda etapa con el FC Barcelona. Un gol, el del empate, que acabó siendo decisivo para que el equipo de Koeman sumara un punto ante un rocoso e intenso Sevilla (1-1). El centrocampista brasileño ha irrumpido con fuerza y acierto y, de seguir en esta línea, está llamado a ser uno de los jugadores determinantes del nuevo Barça.

Coutinho anotó el gol más tempranero del conjunto azulgrana en la presente temporada, superando a los habituales de Ansu Fati, que vio puerta ante el Celta en el minuto 11 y, contra el Villarreal, en el 15. El brasileño lo anotó en el 10, dos después de que Luuk De Jong inaugura el marcador.

El tanto de Coutinho lo fabricó Leo Messi con una profunda asistencia para el brasileño. Jesús Navas, ya dentro del área, fue al corte pero se le escapó el control, llegando el esférico al ‘14’ del Barça, que definió con tranquilidad a puerta vacía. Coutinho suma ya un gol dos asistencias, ambas a Ansu Fati.

Destacó, por otra parte, la celebración del crack, diametralmente opuesta a la de su último gol en el Camp Nou, en la que se tapó los oídos. Ayer dedicó el tanto a su futuro bebé, poniéndose el balón en la barriga por debajo de la camiseta.

Un nuevo ‘Cou’

El futbolista más caro de la historia del FC Barcelona (120 millones más otros 40 en variables) ha regresado con energías renovadas después de su cesión al Bayern Múnich, con el que firmó el triplete. El secreto de este despegue, como aseguró recientemente Koeman, hay que encontrarlo en la lógica: “Para sacar lo mejor de un jugador hay que empezar por ponerlo en su sitio”.

Coutinho inauguró ayer su cuenta realizadora con el Barça en esta segunda etapa, que espera sea más prolífica que la primera, entre enero de 2018 y mayo de 2019, tiempo en el que jugó 76 partidos oficiales y firmó 21 goles, además de ganar cuatro títulos. Para superar estas cifras tiene tres temporadas por delante dado que su contrato expira el 30 de junio de 2023.