Termina contrato con el Chelsea en 2016

Courtois presionará para venir

La intención del club londinense es retener al belga, pero el meta quiere seguir en España y desconfía de su rol con la presencia de Cech en el conjunto de Mou

Dídac Peyret

Thibaut Courtois es el nombre señalado en rojo por la dirección deportiva para relevar a Víctor Valdés. Entiende el club que el belga no solo tiene el perfil futbolístico adecuado, sino que además se da el contexto necesario para acometer el fichaje con posibilidades de concretarlo.

En primer lugar porque el club cuenta con el impulso del futbolista, encantado con la posibilidad de seguir en España y firmar por el Barcelona. La presencia de Cech en el Chelsea –y su deseo de  no volver a Inglaterra– pesan en la decisión del portero del Atlético, equipo en el que se encuentra cedido y donde se ha destapado como uno de los mejores porteros de la Liga.

La operación, sin embargo, se prevé compleja por la posición del Chelsea, que ha dirigido su carrera para que pudiera formarse y volver cuando estuviera preparado para cumplir en la máxima exigencia. Fichado por 9 millones procedente del Genk, el club londinense invirtió en un meta con un perfil parecido al de Cech y encontró en el Atlético un acomodo magnífico para que cogiera experiencia en una liga importante como la española en un equipo capaz de competir, también a nivel europeo.

La decisión de Valdés ha hecho que el Barcelona se vea obligado a buscar un meta que ofrezca rendimiento inmediato y un plan de futuro en una posición particularmente controvertida. Zubizarreta cree que Courtois encaja en ese retrato robot y la dirección deportiva ya se ha movido para acelerar un fichaje prioritario teniendo en cuenta que el vínculo de Valdés con el club azulgrana termina el próximo mes de junio.

La estrategia azulgrana

Una vez Zubizarreta decidió apostar por la vía Courtois, la maquinaria del club se puso en marcha para conocer las intenciones del portero. La dirección deportiva quería constatar si había –o no– un interés fuerte del futbolista en recalar en el Barcelona, pues la operación exige que el futbolista presione dada su situación contractual (termina contrato con el Chelsea en 2016). Para ello el club contactó con el futbolista y su entorno más cercano y confirmó que, efectivamente, la ilusión del belga es jugar el próximo curso en el conjunto azulgrana.

Durante este proceso, el club también ha tenido la oportunidad de hablar con el Atlético durante las negociaciones por Villa para conocer su situación con el club colchonero. La postura del conjunto rojiblanco fue clara: el Chelsea no tiene intención de desprenderse del futbolista. El Barcelona intuye las dificultades que pondrá el Chelsea con la operación, pero luchará su fichaje, pues entiende que se trata de una decisión trascendental para el futuro de la entidad que debe afrontar la salida del portero más exitoso de su historia.

Acertar en su relevo es el gran reto para la dirección deportiva el próximo verano y gran parte del presupuesto destinado a nuevas incorporaciones se destinarán a el fichaje del portero.

Un 'top' con margen de mejora

Thibaut Courtois (Bree, 11 de mayo de 1992) ha confirmado en el Atlético las previsiones que le auguraban un futuro en la élite de porteros en Europa. Su debut con apenas 16 años en la liga belga ya invitaba a pensar en un tipo especial y sus condiciones físicas parecían echas a medida para ocupar un sitio en la portería.

Portero de gran envergadura –mide cerca de dos metros– cuenta con unos reflejos espléndidos y una tranquilidad asombrosa para su edad (21 años). En el Atlético destacan que ha progresado en todo y ha ganado mucha coordinación. Courtois ha sobrevivido a un club  como el Atlético con tendencia en la última década a engullir futbolísticas y ha hecho olvidar a un De Gea que irrumpió con gran fuerza en el Atlético. Los que trabajan con él destacan su capacidad para salir bien parado de la presión. Nada raro si se tienen en cuenta declaraciones en las que asegura sentir la presión para dar su mejor nivel. “Sin ella, no estás luchando por nada”, subraya.

Villas-Boas fue el técnico del Chelsea que dio su visto bien a la cesión al Atlético y este verano Mourinho habló personalmente con el belga para  conocer sus intenciones. El meta sintió que su sitio de momento era el Atlético, donde le ilusionaba la posibilidad de ser protagonista este curso en la Champions. El próximo verano de nuevo tendrá que consensuar con el Chelsea su futuro.

En el Barça están convencidos de que escribirá el próximo capítulo en el Camp Nou.