La condición de Busquets para firmar un acuerdo con el Barça

El capitán da todas las facilidades para ayudar al club con la rebaja y diferimiento de sueldo

Solo pide una cláusula para poder salir a final de esta temporada si siente que su ciclo en el Barça ha acabado

Busquets se reunió con Xavi el lunes

Busquets se reunió con Xavi el lunes / David Bernabeu

Jordi Gil

Jordi Gil

Sergio Busquets ha abierto la puerta a ayudar al FC Barcelona para rebajar el fair-play financiero y poder inscribir a nuevos futbolistas. El primer capitán es consciente de las dificultades del club y está dispuesto a aceptar una rebaja o diferimiento de su sueldo con una sola condición: a final de esta temporada 2022-23 tener en sus manos la decisión de poner fin a su etapa en el Barça si entiende que es el momento idóneo.

Busquets ha escuchado la propuesta de renovación para diferir su sueldo en algunas temporadas más, en un aplazamiento pactado incluida una rebaja, pero el Barça debe dar con la tecla para encajar las soluciones con el marco legal de LaLiga.

Si Sergio renueva, pero llegado a junio entiende que cerca de cumplir 35 años ha llegado el momento de poner punto y final a su etapa como jugador barcelonista, quiere tener libertad para salir. Entonces, el problema llega en que todo el sueldo diferido en otros años se computaría en la actual campaña, según el criterio de LaLiga. Por tanto, el Barça no liberaría 'fair-play'.

Busquets saluda a Piqué en el momento de salir del campo ante el Rayo Vallecnao

Busquets saluda a Piqué en el momento de salir del campo ante el Rayo Vallecnao / AFP

Inter de Miami

Además, el jugador tiene la idea de jugar en la liga americana, la MLS, y si se marcha al Inter de Miami, el club que más le seduce, también podrían existir problemas fiscales para percibir las cantidades pendientes de su contrato en España.

El Inter de Miami tampoco está en condiciones de asumir la ficha que le debería el Barça debido a los estrechos márgenes salariales de la MLS, por lo que no es posible abrir esta vía.

Por tanto, el FC Barcelona se sitúa en un escenario complejo a nivel fiscal para cumplir con la voluntad del futbolista, que quiere ayudar al club, pero el contexto solo pone adversidades para que así sea.