Ni el Barça ni el jugador están por la labor de un traspaso

Cesc resiste las presiones del Manchester United

El de Arenys sigue ajeno a los cantos de sirena que llegan desde Old Trafford y está centrado en cumplir su sueño de encandilar definitivamente al Camp Nou

Jordi Gil

El futuro de Cesc Fàbregas pasa únicamente por el Camp Nou. El jugador tiene totalmente decidido seguir, tal y como ha venido informando SPORT, y en ningún momento se le ha pasado por la mente un cambio de aires. Cesc dio su palabra a Tito Vilanova antes de marcharse de vacaciones y, tras la recaída del entrenador, la última cosa que le pasaría por la cabeza sería abandonar el barco. Además, la confianza que le mostró el 'Tata' Martino en la presentación del viernes le ha ilusionado para arrancar con fuerza el trabajo a partir de hoy.

El interés del Manchester United por contratarle ha pasado a ser una obsesión casi enfermiza. Las llamadas de representantes del club inglés a su representante, Darren Dein, son diarias para intentar convencerle, pero Cesc tiene totalmente decidido continuar y ha dado órdenes a su agente de ni tan siquiera dar pie a ninguna negociación, rechazando incluso sentarse a oír la propuesta económica del club mancuniano.

A pesar de que en Old Trafford le elevarían notablemente su ficha, hasta el punto de recuperar el dinero perdido para cerrar su marcha del Arsenal, ni Fàbregas ni su agente han querido participar en ningún tipo de reunión secreta, algo habitual en los primeros pasos de un gran fichaje de estas características. Darren Dein se ha limitado a responder a las llamadas cortesmente y trasladar la negativa al traspaso de un Cesc que ni tan siquiera ha mostrado su predisposición a cambiar de aires. Al contrario. El United es el club con mayor influencia mediática en Inglaterra y está utilizando a la prensa con el objetivo de hacer crecer la sensación de que Fàbregas quiere marcharse del Barça.

Una falsedad que, al llegar a Barcelona, puede alimentar un clima negativo hacia el futbolista que favorezca sus opciones de traspaso. La estrategia está marcada y el técnico, David Moyes, la ha estado respaldando con sus continuas declaraciones afirmando que las negociaciones están en marcha para que la tensión aumente y el Barça o el jugador finalmente cedan. Sin embargo, este juego subterráneo no le servirá de nada al United. El futbolista lo tiene claro y el FC Barcelona también. El nuevo entrenador, 'Tata' Martino, fue contundente a su llegada. A diferencia de las dudas que expresó sobre la continuidad de Jonathan Dos Santos y otros jugadores, el argentino no dejó lugar a dudas al indicar que si el Barça había rechazado dos ofertas por Cesc, él mismo desestimaría una tercera. Estas palabras significaron una auténtica inyección de moral para el '4' blaugrana. Martino, que ya cortó públicamente las especulaciones, se reunirá hoy individualmente con todos los futbolistas, y trasladará de forma privada al de Arenys su total confianza de cara a la próxima temporada.

Por su parte, Cesc agradecerá personalmente ese respaldo mediático, un pequeño gesto que valora tremendamente Fàbregas, totalmente comprometido para corresponder al `Tata¿ con su mejor rendimiento sobre el terreno de juego. 

Cesc seguirá en el Barça, pero no se librará de un verano muy movido. A pesar de que los blaugrana comunicaron por escrito al United que Fàbregas era instransferible, los 'diablos rojos' confían en que el FC Barcelona pueda dar su brazo a torcer con una última oferta que presentará en los próximos días y que superará los 40 millones de euros ofrecidos esta semana. Sin embargo, su propósito tiene a día de hoy nulas opciones de acabar con éxito, a pesar de que la prensa inglesa continuará vendiendo humo hasta el final del mercado.

Y es que el United seguirá dando pie a todo tipo de comentarios y filtraciones falsas a sus medios afines para que sus aficionados tengan la impresión de que el club ha hecho todo lo posible para obtener el traspasado más deseado por los hinchas de los 'red devils'. Cesc es la pieza que ilusionaría nuevamente a la afición de Old Trafford, un tanto alicaída al ver los problemas que están surgiendo con uno de sus referentes, Wayne Rooney, y la falta de un jugador creativo en la medular. Una aspiración que quedará en un sueño porque en el fútbol hay una máxima que asegura que los grandes futbolistas siempre juegan donde quieren, y Cesc Fàbregas tiene claro, desde pequeño, que quiere triunfar vestido de blaugrana.