Celta - Barça: ganar, ganar... o ganar

Hacía muchas temporadas que la la Liga española no estaba tan emocionante. No era normal lo que venía ocurriendo los últimos años, donde en febrero, el Real Madrid ya estaba a más de diez puntos del Barça.

Aunque desde el punto de vista de los aficionados barcelonistas la situación era la ideal, para la salud de la competición es bueno que esa rivalidad dure hasta la foto finish. De hecho, la situación está exactamente así entre el Real Madrid y el Barça. Los blancos, líderes por la diferencia de goles particular, circunstancia que no ocurre en otras ligas, donde el campeón es quien presenta mejor gol average general.

Prohibido perder

Lo que ocurre cuando el liderato está tan ajustado es que el margen de error no existe. O si existe, se paga muy caro. Que se lo digan al propio Barça, dado que su empate ante el Sevilla (0-0) le costó ceder el liderado en beneficio del Real Madrid.

Estando así las cosas, en esta cuenta atrás vertiginosa, empatar o perder es ponerle el título en bandeja de plata al eterno rival. Dijo ayer Setién que no cree que el Real Madrid vaya a sumar todos los puntos, contradiciendo a Gerard Piqué, que tiró de ironía para explicar que hasta donde no llegan los blancos con su juego, lo hacen los árbitros y el VAR con sus decisiones que dejan mucho margen a la interpretación.

Duro hueso de roer

Quedan siete partidos de Liga por disputarse y el Barça tiene un calendario duro. Muy duro. Esta tarde, sin ir más lejos, le toca batirse el cobre ante uno de los oponentes que peor se le viene dando en los últimos años: el Celta de de Vigo. Cómo será que los celtiñas no han perdido contra el Barça en los últimos cuatro partidos y dos de ellos le ha endosado al equipo azulgrana ¡cuatro goles!.

Por lo tanto, ¡ojo Barça! Los locales, a siete puntos de los puestos de descenso, querrán celebrar la reciente renovación de su técnico Óscar García con una victoria. El Celta, como renonoce Setién, tiene vocación ofensiva, es valiente y va a exigir lo mejor de Barça con bajas importantes en la medular, como son Sergi Busquets (sancionado por acumulación de tarjetas amarillas) y Frenkie de Jong (lesionado).

‘Factor’ Riqui Puig

Estas ausencias, sumada las peripecias que está viviendo Arthur Melo con su traspaso a la Juventus, podrían provocar la titularidad del canterano Riqui Puig, que tan buen papel desempeñara frente al Athletic.

La velocidad de acción y dinamismo en el juego de Riqui  han convencido al entrenador, que en su conferencia de prensa admitió que ha sabido aprovechar las oportunidades que ha tenido y que ahora tiene que seguir dando pasos hacia adelante.

Lo mismo vale para Ansu Fati, más decidido y resolutivo en el uno contra uno que el mismísimo Antoine Griezmann. A la hora de la verdad poco importa quién eres, cómo te llamas o cuánto dinero has costado. Cuenta el día a día, tu rendimiento. Y en ese sentido Riqui Puig y Ansu Fati están convenciendo más que otros futbolistas más consagrados.

Hoy toca ganar en Balaídos, sí o sí. Ni siquiera el empate sería un buen resultado.