Carlos Soler pudo ser blaugrana por solo un millón de euros

Albert Masnou

Albert Masnou

Carlos Soler pudo haber sido uno de los grandes talentos de La Masia y del Camp Nou. No en vano, estuvo en el punto de mira del Barcelona no hace demasiado tiempo, cuando ya destacaba en la cantera del Valencia antes de ser uno de los futbolistas españoles con más proyección en la actualidad. Así lo ha confesado hace poco Pep Serer, ex ojeador azulgrana, quien ha explicado que el jugador se quedó a muy poco de ser barcelonista gracias a unas cualidades que nunca pasaron desapercibidas en Can Barça.

Todo se remonta a finales de 2015. Soler jugaba a las órdenes de Curro Torres en el Valencia Mestalla y su talento era conocido internacionalmente, hasta el punto de que entidades de primer nivel estuvieron estudiando su incorporación. Por ese motivo, el club valencianista quiso renovarle aunque las negociaciones se dilataron en el tiempo y eso abrió una ventana al Barça, quien en aquellos días aún contaba con Robert Fernández como secretario técnico. De su mano, y como buen conocedor del Valencia, llegaron al  Camp Nou jugadores che como Paco Alcácer o André Gomes.

Los puntos en común no acaban ahí. El encargado de llevar a buen puerto las conversaciones para ampliar la relación contractual con Soler con el Valencia fue Jose Ramón Alexanco, capitán del Barça que alzó la primera Copa de Europa y en esos días director de la Academia. Alexanco llevaba pocos meses en el club y no valoró con suficiente perspectiva los 12 años de juego de Soler en el Valencia. Tampoco, el compromiso del canterano con la institución y con los valores que representa desde bien pequeño.

Por ese motivo, la negociación para renovar su contrato duró más de lo esperado. Mientras tanto, otros equipos importantes se fijaban en la versatilidad que había demostrado el valencianista, y uno de los que se interesó con mayor intensidad fue el Barcelona, como ha admitido Pep Serer. El entonces ojeador estaba en el equipo de Robert Fernández, y su conexión como ex jugadores del Valencia se puso en marcha. No tuvieron mal ojo en este caso, como tampoco sus predecesores, quienes tantearon sin éxito al medio en categoría alevín e infantil.

Sin embargo, Carlos Soler no quería saber nada de rumores ni especulaciones en 2015. Su único interés era seguir en el Valencia y convertirse en un ídolo de Mestalla, como ha acabado siendo. Ahora bien, siempre y cuando se le valorarse y ofreciesen un proyecto para poder llegar al primer equipo. Su compromiso con el Valencia siempre ha sido sobresaliente. Siente el valencianismo desde pequeño. Algo que, por aquellos días, Alexanco no le aseguraba.

Tuvo que ser a última hora, cuando Suso García Pitarch, entonces director deportivo del Valencia, intervino con plenos poderes para desbloquear la situación y renovarle. De no haberlo hecho, quien sabe si Soler estaría en estos instantes vestido de blaugrana por sólo 1 millón de euros que costaba su rescisión en aquellos días. Todo un valor a muy buen precio, ya que en la actualidad su valor de mercado es de 40 millones, a pesar de que antes de la cuarentena por el covid-19, el portal Transfermarkt lo tasaba en 50.

La realidad es otra. En marzo de 2016, con tan solo 17 años, Carlos Soler firmó su primer contrato y fue también premiado por Luis de la Fuente para ir convocado con la selección española sub 19. Poco tiempo después, 9 meses, Carlos debutó con el primer equipo del Valencia. El resto, es por todos conocido: más de 150 partidos con el equipo con sólo 23 años. Y un recién estrenado contrato hasta 2023 convirtiéndose en uno de los jugadores mejor pagados de la entidad.

Cierto es que el Barcelona volvió a preguntar por él, pero ya era tarde. Gerard López reconoció no hace mucho que también quiso ficharlo para el Barcelona B. No fue posible. La historia de Carlos Soler y el Barcelona pudo haber sido una realidad hace tiempo, ya que se trata de un jugador con un marcado perfil azulgrana. Algo muy difícil de encontrar.