Al Camp Nou tras quitarse una losa tremenda de encima

El Elche llega al coliseo azulgrana repleto de moral después de lograr su primera victoria liguera en cuatro meses

Desde el pasado 23 de octubre no sabía lo que era ganar el cuadro ilicitano, en el que se estrenó Fran Escrivá

Ter Stegen vuelve a vestirse de héroe ante el Elche

Sergi Capdevila

Sergi Capdevila

En medio de un clima de decepción después de dejar escapar una magnífica oportunidad ante el Cádiz de engancharse al tren de la Liga, el Barça recibe este miércoles en el Camp Nou a Elche. Sobra decir que todo lo que no sea ganar frente al cuadro ilicitano, 18º en la tabla, significa, de forma definitiva, despedirse de cualquier atisbo de opción de alzar el título liguero.

Y lo cierto es que si por algo se caracteriza este Elche es por vender muy cara su piel. Todo el mundo lo daba como candidato principal al descenso; de hecho, pocos se esperaban que a estas alturas estuviera con todas las opciones del mundo de salvarse (el propio Edgar Badia, santo y seña del equipo alicantino, nos lo comentó hace unas semanas en una entrevista a SPORT). Y si a ese pundonor le añadimos que vienen de romper una racha terroríficamente mala de cuatro meses (sí, cuatro) sin ganar en Liga, le añade un plus de peligrosidad.

AGARROTAMIENTO

Y es que la losa que arrastraba el conjunto franjiverde era enorme. La última victoria en el campeonato doméstico se había producido el pasado 23 de octubre. El Valencia había sido la última 'víctima' del cuadro de Almirón, que realizó un arranque de curso espectacular sumando 10 de los primeros 15 puntos en juego. Pero ahí se cerró el grifo. Desde entonces, 17 partidos de Liga consecutivos y ningún triunfo. Solo en Copa, y ante rivales de menor entidad como Buñol y La Nucía se habían podido saborear las mieles de la victoria.

Pero ante el Eibar, en el estreno de Fran Escrivá en el banquillo, por fin pudo ponerse freno a esa malísima dinámica. Un solitario gol de Dani Calvo, que ha pasado en un periquete del ostracismo con Almirón a titular y protagonista con Escrivá, le daba los tres puntos a un equipo ilicitano que sueña con permanecer, por lo menos, un año más en Primera. Nueve derrotas y ocho empates en esa larga travesía por el desierto se habían sumado. Pero ojo, porque aterriza en Barcelona un equipo con una salud mental totalmente renovada...