El Camp Nou, campo prohibido para el peor Simeone

El Cholo no sabe lo que es ganar en el Estadi: siete empates y siete derrotas

Las 10 derrotas en 30 partidos son su peor balance a estas alturas en el banquillo del Atlético

El Atlético vuelve al trabajo con la baja de Oblak por Covid

El Atlético vuelve al trabajo con la baja de Oblak por Covid / ATLAS

Xavi Canals

Xavi Canals

Diego Pablo Simeone vive su peor temporada desde que tomara las riendas del Atlético, un ya lejando mes de diciembre del 2011. El Atlético ha perdido diez de los 30 partidos disputados, lo que le ha costado una eliminación prematura en la Copa del Rey a manos de la Real Sociedad, el KO en las semifinales de la Supercopa de España, ante el Athletic, y ver al Real Madrid a 14 puntos de distancia.

El mal balance solo le ha permitido mantenerse vivo en la Champions League, tras una última jornada de la fase de grupos agónica. El balance se completa con siete empates y solo 13 victorias.

Nunca antes había encajado el Cholo un número tan elevado de derrotas a estas alturas de curso. Sus peores registros fueron las campañas 2016-2017 y 2019-2020, con solo seis partidos perdidos después de los 30 primeros compromisos. Y la visita al Camp Nou no es, viendo los antecedentes, una buena plaza para cambiar esa dinámica.

Los colchoneros vendrán a Barcelona reforzados por la épica remontada contra el Valencia en la última jornada, pero Simeone no sabe lo que es ganar en el Estadi después de 14 intentos. Su balance en el coliseo blaugrana es de siete derrotas por siete empates. Eso sí, uno de esos empates le sirvió para levantar su primer título de Liga.

Fue la última jornada de la temporada 2013-2014. El Atlético hizo valer el gol de Godín para sellar un 1-1 que le permitió mantener el liderato y proclamarse campeón. Eso sí, con un gol legal anulado a Leo Messi que hubiera dado el campeonato al Barça del Tata Martino.

Simeone firmó esa temporada sus mejores números en el banquillo del Atlético. En los 30 partidos disputados sumó 23 victorias por seis empates y un único KO. Lejos quedan esos momentos felices y tras su paso por el Camp Nou deberían seguir estando lejos.