Bolsonaro, ¿al rescate de Ronaldinho?

El encarcelamiento de Ronaldinho Gaucho y su hermano, Roberto de Assis, por haber accedido a Paraguay con pasaportes y documentos de identidad locales falsos, podría llegar a movilizar hasta el presidente brasileño, el ultraderechista, Jair Bolsonaro.

Esta es la hipótesis que barajan varios medios de comunicación paraguayos que han denunciado, este lunes, la estrategia de los abogados de los hermanos Assis Moreira. “Defensa de Dinho recurre al arma de la presión diplomática”, estampa, por ejemplo, en su portada de hoy el periódico Última Hora. 

En páginas interiores, se indica que durante la rueda de prensa que el abogado brasileño Sérgio Queiroz, realizó domingo en Asunción, éste indicó que el Consulado de su país está tomando nota de las supuestas irregularidades del proceso que han llevado a Ronaldinho y a su hermanísimo a la cárcel y que todo lo sucedido “va a ser reportado al Gobierno brasileño”.

El rotativo cualifica de “una velada amenaza con la vía diplomática”, las declaraciones del letrado de los hermanos Assis Moreira, que explicó que el cónsul brasileño, Alfonso Nery, estuvo el sábado en el Poder Judicial, como autoridad diplomática, para “identificar todas esas irregularidades” y, posteriormente, “ser reportadas al Gobierno brasileño”. 

Aunque el abogado indicó que su trabajo no es presionar directamente al presidente Jair Bolsonaro, este es un camino que ya podría haberse abierto, según los medios paraguayos. Por su parte, el equipo de comunicación de Bolsonaro, no se ha pronunciado sobre un asunto que ha dejado boquiabierta a la opinión pública brasileña.

Ronaldinho fan de Bolsonaro

Ronaldinho Gaucho asoció su imagen a la de Jair Bolsonaro en la campaña electoral de las presidenciales de 2018, cuando el exjugador pidió abiertamente el voto para el candidato ultra.

Esta fue una decisión muy polémica, que no sentó nada bien en el FC Barcelona, donde el ex ‘10’ ejerce como embajador del club en algunos actos publicitarios alrededor del planeta y por los cuales percibe honorarios.

Bolsonaro, homófobo y misógino declarado, retribuyó el favor nombrando, en septiembre de 2019, a Ronaldinho, junto con otros comunicadores y artistas que le habían dado apoyo, como embajador del turismo.

La decisión no fue exenta de controversia, porque, en aquel momento, Ronaldinho, así como su hermano, tenía los pasaportes brasileño y español retenidos por la Justicia de Rio Grande do Sul, por haber cometido supuestamente un delito medioambiental en su estado de origen. “¿De qué sirve un embajador del turismo brasileño que no puede viajar al exterior?” se preguntaban en Brasil.

Cuando Ronaldinho fue detenido en Paraguay, el gobierno de Bolsonaro apoyó al crack a través de una esperpéntica nota pública de Embratur, la agencia gubernamental de turismo, donde se señalaba que las investigaciones de las autoridades paraguayas se trataban de “una cuestión personal” del exjugador, y se recordaba que su cargo era “honorífico”. 

Lo cierto es que, en las redes sociales, solo la ‘milicia digital bolsonarista’, clave en la elección del presidente de extrema derecha con sus prácticas ahora investigadas en el Congreso, se muestra abiertamente a favor de la liberación de Ronaldinho.  Otro capítulo aparte es el de los memes.