Bellerín, pendiente de Wenger

Tomàs Andreu

Tomàs Andreu

El Barça quiere tratar el traspaso de Héctor Bellerín con la mayor de las sutilezas posibles. El club sabe que la operación es extremadamente delicada, tanto por la dificultad de arrebatar al Arsenal a uno de sus pilares como por la envergadura económica de la operación, y se ha marcado como objetivo no hacer un movimiento que pueda crispar los ánimos en un Emirates que ya se encuentra al límite por los malos resultados de esta temporada.

El Barça entiende que no puede dar un paso en falso en todo el proceso negociador si no quiere verse involucrado en una guerra con el Arsenal o en una puja con CityBayern y otros posibles clubs europeos de primera línea. En tal caso también perdería la complicidad del propio jugador.

Tal y como adelantamos ayer, el primer paso ya está dado con Bellerín y su entorno. El jugador sabe que el Barça va a por él y está en disposición de asumir sus condiciones contractuales. El segundo movimiento es fundamental y exige guardar discreción y paciencia. Según la dirección deportiva azulgrana, se espera que Arsène Wenger desvele su futuro antes de finalizar este mes. Y es que la continuidad del técnico francés es vital para entender el panorama Bellerín.

Héctor es feliz en el Emirates y su relación con Wenger es excelente. Sin el beneplácito de Arsène, el lateral catalán no forzará su marcha. El adiós del veterano técnico facilitaría la salida del futbolista, que se plantearía incluso ayudar en la negociación. Eso sí, siempre bajo un clima de concordia.

Con Bellerín en sintonía y el futuro de Wenger clarificado, el Barça ha garantizado que llamará a las puertas del Emirates para pedir hora con Richard Low, director de operaciones, e Ivan Gazidis, máximo ejecutivo del club ‘gunner’. Será el momento de hablar de números y plantear la oferta económica inicial.

Héctor Bellerín solo abandonará el Emirates entre abrazos y compensaciones económicas. El Barça asume que la puja arrancará en una cifra estimada sobre los 40 millones de euros. A partir de ahí, el generoso capítulo de bonificaciones por objetivos y el posible interés del Arsenal en jugadores con el cartel de transferibles en el Camp Nou pueden contribuir a que la operación final no alcance cifras astronómicas y haga peligrar el fichaje.