Bartomeu no quiere más experimentos

Tras los experimentos fallidos de Boateng y Murillo de la temporada pasada, Bartomeu quiere que, si se afronta el fichaje de un nueve ahora, sea un jugador de garantías. Un futbolista que tenga un impacto inmediato en el equipo, pero que también tenga una proyección a largo plazo.  

El presidente, que también asumió la vicepresidencia deportiva tras la dimisión de Jordi Mestre, no quiere un parche eventual para sustituir a Luis Suárez. 

La lesión del uruguayo, que estará de baja cuatro meses tras ser operado por segunda vez del menisco de la rodilla derecha, ha hecho que el Barça esté abierto a incorporar a un delantero en este mercado de invierno. Y si surge la oportunidad la primera opción es el argentino Timo Werner, un futbolista que gusta mucho y de futuro. 

En el club no esperaban que Suárez estuviera tanto tiempo de baja y se ha abierto un periodo de reflexión para valorar las opciones de traer a un ‘9’ de primer nivel. Si finalmente se va con todo a por el fichaje, el club adelantaría el que tenía que ser el fichaje prioritario de la próxima temporada, el del delantero centro.

De la decisión final dependerá también la opinión de Quique Setién, que debería ser también el entrenador del proyecto de la próxima campaña. Cuestionado sobre el asunto, el exentrenador del Betis no ha querido mojarse hasta ahora.

Setién pidió tiempo para conocer a sus nuevos jugadores antes de tomar la decisión definitiva. En su debut en el banquillo azulgrana apostó por juntar a Messi y Griezmann en la delantera.

El francés jugó más centrado que en la etapa de Valverde y el técnico dejó las bandas para Jordi Alba y Ansu Fati. En el caso de que llegara un nuevo delantero centro, todo apunta a que sería Griezmann el que caería a la banda derecha del ataque azulgrana.

Otra de las incógnitas es la manera cómo Setién integrará al equipo a Ousmane Dembélé cuando se encuentre recuperado. El francés ya está en Barcelona pero, si se mantiene el tiempo de baja estimado, no debería estar listo hasta mediados de febrero. 

Bartomeu tendrá la última palabra sobre un nuevo refuerzo.

De momento el presidente ya intervino a media temporada, contra pronóstico, con la destitución de Valverde y la llegada de Setién. Un gesto que subrayó el interés de Bartomeu en cambiar la dinámica a corto plazo.

La llegada de un nuevo delantero centro iría en la misma línea. Tratar de lograr que esta temporada sea un éxito tras la importante inversión realizada.

De Davids a Todibo, los fichajes de invierno

Amunike, Bogarde, los hermanos De Boer, Juan Pablo Sorín, Davids, Maxi López, Pinto, Afellay, Coutinho, Yerry Mina, Murillo, Boateng  y Todibo. Todos tienen en común que jugaron en el Barça y llegaron en el mercado de invierno. Algunos pasaron con más pena que gloria y otros lograron dejar huella.

Es el caso de Edgar Davids, que tuvo un impacto inmediato en el equipo. El holandés llegó a mitad de temporada en el Barça de Rijkaard y su sola presencia supuso un impulso para jugadores como Xavi.

Con la aparición de Davids el de Terrassa avanzó unos metros su posición y empezó a mostrar su mejor versión. El Barça pasó del 4-2-3-1 al 4-3-3 y Davids fue clave para el equilibrio. Pero al final de temporada, y contra pronóstico, aceptó la oferta del Inter.

No le fue mal al Barça que apostó por Deco. Todibo, que juega cedido en el Schalke 04, fue el último refuerzo de invierno del club.