Bartomeu defiende su modelo de gestión y promete un futuro brillante

Josep Maria Bartomeu defendió su modelo de gestión ante los socios compromisarios que participan este sábado en la asamblea anual del club y prometió un futuro esperanzador y brillante para el Barça, justo cuando cumple el ecuador de su mandato (2015-2021).

“Nos quedan muchas cosas por delante, el horizonte es largo y tenemos el  objetivo de ser la institución más admirada, querida y global del mundo”, insistió. También pasó balance a su mandato, desde 2015: “quién nos iba a decir que en estos años ganaríamos 49 títulos, que el fútbol femenino sería tan competitivo, que ganaríamos la Youth League dos veces, que estaríamos cerca de los 1.000 millones de ingresos o que seríamos el club que más ingresa en patrocinios”. 

“El club está cada día mejor, con oficinas en Hong Kong y Nueva York y con 45.000 niños y niñas participando en las Escuelas del Barça en todo el mundo”, añadió.

A la hora de hablar de futuro, Bartomeu destacó las buenas expectativas del Espai Barça (“el camino no ha sido fácil, hemos picado mucha piedra pero hemos llegado a un acuerdo con el Ayuntamiento y la Generalitat”), con la inauguración, la próxima primavera, del estadio Johan Cruyff junto a la Ciudad Deportiva.  

“Las obras durarán años”, previno, “y habrá dificultades, pero lo haremos lo mejor posible para seguir disfrutando del fútbol en nuestro estadio”. 

"¿Quién dice que no tenemos modelo?"

“¿Quién dice que no tenemos modelo?”, se defendió Bartomeu. “Claro que lo tenemos, tenemos un modelo deportivo y de gestión muy importante”. 

"Ahora puedo decir, mirando atrás, que el Barça es más fuerte, sostenible, comprometido y solidario que nunca", añadió el presidente en referencia a sus primeros años de mandato. 

Bartomeu destacó en su discurso que la junta directiva está justo en el ecuador de su mandato, tras ganar las elecciones de 2015, y repasó los tres primeros años del periodo 2015-2021. "Hemos tenido dificultades de todo tipo, pero las hemos intentado superar. Dificultades económicas, por ejemplo, porque el entorno del fútbol ha cambiado mucho, con clubes estado, propietarios multimillonarios y clubes en manos de fondos de inversión, ajenos a la industria del fútbol".

"Pero también hemos vivido un entorno complicado con la situación sociopolítica de Catalunya", abundó Bartomeu, "y puedo decir con la cabeza alta que hemos superado esas dificultades siendo siempre fieles a nuestras convicciones históricas y defendiendo valores innegociables, como la libertad de expresión, el derecho a decidir y la voluntad de apoyar lo que decida el pueblo catalán".

En ese sentido, el presidente reclamó "que las situaciones se resuelvan con diálogo y negociación política" y apoyó la libertad los presos independentistas y del ex presidente azulgrana, Sandro Rosell, "que lleva un año y medio en prisión de manera injustificada".