El Barça B rozó el milagro durante media hora

Lo intentaron desde el inicio y hasta el final, pero el 0-2 de la ida en el Mini Estadi pesó demasiado ante una Cultural Leonesa que volvió a dar una exhibición de experiencia y veteranía para lograr el ascenso a Segunda División. Los blaugrana se adelantaron y pusieron en aprietos durante muchos minutos a los leoneses, aunque no hicieron lo suficiente para hacerles dudar. Toca pensar ya en las dos siguientes eliminatorias, la última oportunidad para acabar el trabajo.

Un 0-2 no permite interpretaciones. Gerard López no necesitó darle demasiadas vueltas a la cabeza para saber cómo debía presentarse su equipo en León. Tampoco los jugadores tuvieron dudas y, desde el primer minuto, se fueron a por la Cultural Leonesa. A los cuatro minutos Romera disparó fuera en la primera ocasión clara a centro de Fali. A los dos minutos reclamó penalti por un agarrón. Tanta efervescencia en ataque, lógicamente, provocó desajustes atrás. Todo tiene un precio. Gallar pudo cerrar la eliminatoria a los diez minutos, pero chutó flojo y Varo detuvo sin problemas. Lo volvió a probar cinco minutos más tarde con un balón que se estrelló en la base del palo.

alfaro permite soñar

Cuando los blaugrana entendieron que debían atacar, pero también y, sobre todo, mantener el balón el mayor tiempo posible, el equipo funcionó algo mejor y dejó de sufrir tanto en defensa. Fue entonces cuando llegó con más claridad. Cardona lo probó de cabeza, Palencia desde lejos y Gianni estuvo a punto de marcar en propia puerta tras una falta servida por Gumbau. Palatsí lo evitó. El gol, paradójicamente, llegó a la contra. Romera peinó un balón y dejó solo a Alfaro ante el meta leonés. Su disparo cruzado fue el 0-1. La eliminatoria, más abierta que nunca. 

Empatar el cruce estaba a un gol, una situación que obligaba a reflexionar: ir a por todas o mantener la calma. Demasiadas exigencias para un equipo joven como el filial blaugrana, así que mejor seguir apretando, pensó Gerard. Al fin y al cabo, es lo que mejor saben hacer. Romera fue víctima de un penalti tras una gran asistencia de Aleñá que no fue señalado por fuera de juego previo. Martínez no acertó a rematar de cabeza a la salida de un córner. La Cultural Leonesa lo estaba pasando mal, pero contaban con una virtud que no se entrena, la experiencia. Gerard cambió a Aleñá, que tenía tarjeta, por Perea. Más leña al fuego. El rival no se asustó y esperó su momento para, a la contra, empatar gracias a una excelente definición de Colinas. Tocaba volver apretar los dientes. 

gana la experiencia

La Cultu aprovechó el 1-1 para convertir el partido en algo parecido al fútbol, pero alejado de él. Faltas, pérdidas de tiempo, discusiones por cualquier decisión... Marrullería veterana. Perea intentó zafarse del nudo leonés con una acción por banda derecha que a punto estuvo de convertirse en gol en propia meta de los locales. Gallar acabó con todas las esperanzas marcando de falta directa con un magistral lanzamiento desde la frontal. De ahí al final, cuando solo quedaban diez minutos, el encuentro entró en otra dimensión. El Barça B lo intentó por orgullo, pero sin fe. Hubo amago de tangana al final. Nada grave.

El Reino de León celebró el ascenso, mientras que el filial blaugrana deberá buscarlo en las dos próximas eliminatorias. No hay nada perdido. Ser campeón ofrece una segunda oportunidad.