El Barça tiene un plan para la defensa

Ivan San Antonio

Ivan San Antonio

La posición de central ha sido fuente de problemas durante muchas temporadas. Piqué y Puyol formaron una de las parejas más longevas y exitosas, pero el físico del excapitán dijo basta y, desde entonces, Gerard busca compañero para relación seria y duradera. Pareció encontrar a esa persona en Mascherano, pero el argentino decidió irse a la China.

Quien más se ha acercado al perfil solicitado por Piqué es Samuel Umtiti, que encajó como un guante al lado del canterano hasta que una lesión en el cartílago de la rodilla izquierda le colocó un obstáculo en su carrera. La gestión realizada por el futbolista de este contratiempo, negándose a pasar por el quirófano, no solo le apartó del equipo durante tres meses, sino que está provocando que su regreso sea muy accidentado. Lenglet se ha hecho con su sitio aprovechando, con una gran solvencia, la oportunidad que le ha dado el fútbol.

PIQUÉ Y TRES MÁS

Ya lo decía Tito Vilanova hace muchos años, en 2011: "Sin Piqué, se nos caía el invento". Desde entonces han pasado ocho años y la frase sigue más vigente que nunca, como demostró el equipo ante el Villarreal. Se trata de un partido que no ha hecho más que confirmar los planes que tiene el club para cimentar su nómina de centrales, pensando en el presente, pero también pensando en el futuro a largo plazo. La dirección deportiva no quiere verse obligada a, como ha pasado esta temporada, moverse a media campaña para traer, de urgencia, a un jugador como Murillo. Más allá de su rendimiento, se trata de una operación que no gusta en los despachos por la sensación de improvisación que da, de falta de planificación. La intención es contar con cuatro centrales que aporten tranquilidad.

PENSAR A LARGO PLAZO

Los nombres de los cuatro futbolistas con los que espera contar el Barça la próxima temporada están más que confirmados: Piqué, Lenglet, Umtiti y De Ligt. Más allá del holandés, por razones obvias, la continuidad del resto está garantizada hasta 2023, que es cuando finalizan contrato los dos defensas franceses. Piqué acaba un año antes, pero su caso es especial y no se teme por una posible marcha porque ya ha explicado que, cuando decida colgar las botas, lo hará en el Camp Nou.

Si a los tres se une De Ligt, el Barça contará con cuatro futbolistas cuya media edad, exceptuando a Gerard, dará mucha tranquilidad pensando en el futuro. Lenglet ha demostrado que está más que capacitado para rendir como titular y el club tiene fe en recuperar a Umtiti.

BAJAS CANTADAS

Dos de los seis centrales que figuran en la primera plantilla tienen los días contados. Se trata de Murillo, cuyo paso por el Barça habrá sido fugaz después de llegar al Camp Nou el pasado mercado de invierno. Tampoco Vermaelen, que acaba contrato, seguirá. El belga ya sabe que esta es su última temporada de blaugrana.

A ellos, sin embargo, podría sumarse también la salida de Todibo. El central francés ha convencido a Valverde durante los meses que lleva entrenando con la primera plantilla, pero aún le ven algo verde y el club considera que le vendría bien una cesión para crecer y ganarse el derecho a regresar en el futuro. Se trata de decisiones que se tomarán según se desarrollen los acontecimientos alrededor de De Ligt, cuyo fichaje no es solo prioritario, sino que también es absolutamente estratégico de cara al futuro a corto, medio y largo plazo.