El Barça va en serio a por LaLiga

Los blaugrana perdonaron muchísimo, pero no nunca sufrieron por la victoria

Dembélé y De Jong resolvieron tras el descanso con dos goles que valen el liderato

Resumen, goles y highlights del Barça 2 - 0 Almería de la jornada 13 de LaLiga Santander

Resumen, goles y highlights del Barça 2 - 0 Almería de la jornada 13 de LaLiga Santander / LALIGA

Ivan San Antonio

Ivan San Antonio

Gerard Piqué se despidió el Camp Nou dejando al equipo líder tras un partido en el que los blaugrana salieron envueltos en un ambiente extraño, una mezcla de nostalgia futura y ganas de fiesta: aroma a despedida de las grandes. El último partido del '3' ante su gente destilaba todo eso, pero antes había que ganar al Almería porque LaLiga no da tregua. Y el Barça va muy en serio a por el título.

FC BARCELONA - ALMERÍA

LALIGA SANTANDER

2
0
Alineaciones
FC BARCELONA
Ter Stegen, Balde, Piqué (Christensen, 84'), Marcos Alonso, Jordi Alba, Busquets (Gavi, 67'), De Jong, Pedri, Dembélé (Raphinha, 67'), Ferran Torres (Ansu Fati, 60') y Lewandowski.
ALMERÍA
Fernando, Mendes, Kaiky (Babic, 46'), Ely (Eguaras, 67'), Chumi, Akieme, Melero (Puigmal, 67'), Robertone (Portillo, 78'), Samu, Baptistao (Sousa, 46') y Ramazani.

Lo entendió el equipo desde el primer minuto, moviendo el balón con criterio, aportando la velocidad justa en cada acción, con un Ferran Torres que, a los diez minutos, había hecho de todo: centrado, probado el disparo, visto la amarilla por un encontronazo con el meta andaluz y, sobre todo, el cabezazo del penalti de Kaiky.

Tuvo que revisarlo González Fuertes en el VAR no se sabe exactamente por qué. Era clarísimo. Piqué le dijo a Lewandowski que los homenajes, al final. Robert agarró el balón, dubitativo, y, tras 'paradinha' incluída, envió el balón a la base del palo y fuera. Primera gran oportunidad desaprovechada. Lo intentaba el Barça, paciente, obtuso en los córners, tan útiles como una estufa en el desierto. Faltaba algo de precisión, pero el balón solo tenía un dueño y Ter Stegen observaba con prismáticos todo lo que ocurría a mucha distancia. Todo indicaba que el gol, tarde o temprano, llegaría. Pedri recibió un balón en el área de Dembélé, pero dudó entre definir o pasar y ahí se acabó la jugada.

Cada vez que el Barça no concretaba, el Almería ganaba una pequeña batalla a la espera de su oportunidad. La tuvo Ramazani, solo ante Ter Stegen, tras un pase horrible de De Jong en el centro del campo. Salvó el alemán el gol de los de Rubi. Una jugada aislada es eso y nada más.

Mientras, Ferran Torres seguía estando en todas, centrando y rematando. A la espera de que Lewandowski olvidara su error. Con Dembélé viviendo de lejos y Pedri activando al equipo con microdosis de talento. Balde y Alba se sumaban arriba, pero nada era suficiente. Cada vez costaba más. Tener el balón no lo es todo, aunque sea mucho. La mejor prueba fue lo que falló Dembélé, un balón a puerta vacía que regaló de cabeza a Fernando tras una cesión de Ferran, a quien Lewy había dejado solo en el área. Incomprensible. Tampoco acertó el propio Ferran ante el meta poco después. Ni Pedri de cabeza. Ni De Jong a la contra. Ni Balde desde lejos. El Barça se había puesto el traje de misericordioso y no le queda bien.

Dembélé y De Jong rompen el partido

Lo dejó en el vestuario, entre la ropa sucia, y salió a ganar. Dembélé recibió un balón en la banda derecha, un balón muy largo de Busquets, se fue hacia dentro y, tras pisar área, definió ajustado al palo. Gol. Tan sencillo y tan complicado a la vez. Ousmane, ese hombre inescrutable, pudo cerrar el partido a los pocos minutos: recibió, controló, dribló al portero, dejó en el suelo a su defensor y acabó siendo tan barroco que perdonó. Tan complicado y tan sencillo a la vez. Salió Ansu y lo primero que tocó lo convirtió en gol. No literalmente porque su remate lo paró Fernando y el rebote lo encañonó De Jong a puerta. Ahí estuvo la victoria y el liderato. La presión para el Real Madrid.

A falta de seis minutos, Xavi ordenó que el Camp Nou se pusiera en pie para ovacionar a Piqué, para aplaudirle y darle las gracias por una trayectoria irrepetible. Salió el '3', entró Christensen. El balón siguió rodando y mañana saldrá el sol, pero no brillará tanto.